A cuatro meses de la reelección de Álvaro Elizalde como presidente del Partido Socialista y cuando un sector de la disidencia se debate entre mantenerse o no al interior de la colectividad por sus críticas a la conducción, este sábado se lanzará el movimiento Plataforma Socialista que busca agrupar al sector más a la izquierda del partido con miras a una futura alianza política con el Frente Amplio y el Partido Comunista.
“Hoy existe un claro agotamiento de las ideas y perspectivas políticas socialistas”, dice el manifiesto de comenzó a circular esta semana entre los socialistas y ex militantes y al que ya adhirieron los ex presidentes del PS Jorge Arrate, Gonzalo Martner y Germán Correa.
Entre los 100 firmantes que se darán a conocer en la actividad pública de este sábado figuran los diputados Marcelo Díaz, Maya Fernández y Juan Luis Castro; Fernando Atria de Izquierda Socialista, Michelle Peutat, el actor Alejandro Goic, Vivian Bachelet, Ernesto Aguila, Axel Callis, Jaime Pérez de Arce, el alcalde de Independencia, Gonzalo Durán, y el abogado Juan Pablo Mañalich que renunció al PS al día siguiente que se conocieran las denuncias de San Ramón.
“Convocamos a participar a compañeros y compañeras que se sienten, piensan y comparten los valores socialistas. A quienes hoy militan en el PS pero también a aquellos que se han alejado desde hace ya un tiempo o de manera más reciente. A los miles de militantes no refichados; a los socialistas que hoy se encuentran en otras orgánicas, pero que se siguen reconociendo como parte de la cultura socialista”, dice el manifiesto al que tuvo acceso La Tercera PM.
En momentos en que el PS debe iniciar negociaciones de cara a la plantilla de candidatos a las municipales y a la elección de gobernadores, los adherentes al movimiento hacen un juicio crítico a la alianza con la DC y apuestan a un entendimiento con el FA.
“Pensamos que las coaliciones de la transición se han agotado electoral y programáticamente y somos muy críticos que la dirección de la DC se haya transformado en una fuerza que hoy ha contribuido a dar sustento parlamentario al programa de relegitimación neoliberal que impulsa el gobierno de derecha”, dice el texto.
El documento añade: “creemos en la convergencia y unidad con todas aquellas fuerzas que están por una crítica y un programa de transformación del capitalismo neoliberal actual, de manera especial de acrecentar el diálogo y la unidad con el Frente Amplio, el PC, el PPD y Unidad para el Cambio, como base para enfrentar el próximo ciclo electoral que comprende comicios municipales, de gobernadores regionales en 2020, y parlamentarios y presidenciales en 2021”.
CRÍTICA A LA CONDUCCIÓN PS
Plataforma Socialista se instala como un punto medio entre los socialistas que -siendo disidentes a la mesa de Elizalde- creen que se puede seguir en el partido y quienes ya tomaron la decisión de irse.
“Se trata de un nuevo espacio reflexión y debate político, que busca detener la diáspora socialista, y oponerse a las fuerzas centrífugas existentes, sumando y reagrupando a los socialistas para un proyecto de y con la izquierda”, dice el texto.
Entre los firmantes hay una crítica compartida a la conducción actual del PS. Así queda de manifiesto en el texto.
“El Socialismo chileno como corriente política hoy se encuentra en una grave crisis. Es una crisis de proyecto y de sentido histórico. Es también una crisis ética. Su expresión organizacional principal, el Partido Socialista, se encuentra sumido en una profunda despolitización; ha abrazado en los últimos años un pragmatismo político que ha diluido sus principios fundacionales y su condición de fuerza de izquierda. Para muchos socialistas se ha vuelto una organización extraña e irreconocible a la luz de su trayectoria histórica. Ha dejado de ser un partido de militantes y su democracia interna la definen hoy redes clientelares de ‘militantes fichas’. Estas prácticas clientelares han conducido a un grave deterioro ético”.
Insisten en que “ha sobrevenido un grave debilitamiento de su institucionalidad y de su estado de derecho interno. No existe hoy un espacio para el diálogo fraterno en su interior ni para un adecuado procesamiento de las diferencias teóricas y políticas. Las resoluciones congresales suelen ser una concesión a las bases del Partido, para luego, simplemente, no ser cumplidas”.
“Hoy una parte importante de la militancia histórica, del pueblo socialista y allendista no participa del PS. Tampoco resulta un lugar atractivo para las nuevas generaciones y para muchos nuevos líderes que prefieren ejercer su militancia de manera directa en los movimientos sociales o bien en nuevas organizaciones políticas”. (La Tercera)
