La pandemia del Coronavirus es una realidad en más de 140 países, con más de 160.000 contagiados a nivel mundial y casi 8 mil muertes. Este virus se ha expandido rápidamente y solo en Chile se han quintuplicado los casos desde el último viernes. Esta enfermedad y sus consecuencias no solo representan un desafío para los sistemas de salud y las capacidades sanitarias y de infraestructura hospitalaria en el país. También representan un tremendo desafío para la fuerza productiva de Chile, para las empresas, los trabajadores y sus familias.
Pero a pesar de este difícil panorama, la política parece estar al margen de los problemas y miedos reales de los chilenos, y sigue aferrada a sus propios intereses. ¿Cómo no va a ser posible tomar una decisión tan sensata como postergar el plebiscito ahora ya?
Chile necesita, al igual que muchos países del mundo, concentrarse exclusivamente en la emergencia sanitaria que tiene frente a sus ojos. Más de 155 casos y en plena Fase IV, el Coronavirus ya aterrizó en el país y solo queda esforzarnos por detener su avance. Es por ello que necesitamos todas las manos unidas para lograr este objetivo, y no tener nuestra mirada fijada en otros desafíos como el plebiscito o las elecciones. Por eso, es indispensable postergar el plebiscito y tomar esa decisión sin demora.
Por lo pronto, podríamos destinar más de 25 mil millones de pesos que fueron asignados al Servel para enfrentar la emergencia inmediata. Además, los partidos políticos podríamos evitar gastar recursos en campañas y franjas, redestinando todo a ayudar en la emergencia. Hoy es tiempo de acciones concretas, no de dilaciones que pueden causar graves consecuencias.
Hace solo dos días, el Presidente Macron, de Francia, decidió mantener las elecciones para salvar la democracia. Hoy, luego de fracasar las elecciones por la abstención, decretó emergencia en el país y le declaró la guerra al Coronavirus. No cometamos los mismos errores de Macron por defender ideales políticos. Suspendamos el plebiscito ahora y enfoquémonos en defender al país de esta grave amenaza.
Hoy más que nunca se requiere de un amplio acuerdo político para poner el futuro de Chile en el primer lugar. Las consecuencias económicas y sociales del estallido de violencia, sumadas a la crisis del coronavirus que hace estragos en la economía mundial y local nos deben mover en unidad hacia el camino de recuperación del país. El Líbero)
José Antonio Kast
