Según los registros de Gendarmería, a los que tuvo acceso La Tercera vía transparencia, actualmente en Chile hay seis personas, todos varones, que se encuentran cumpliendo condenas por haber practicado un aborto. La mayoría tiene, además, otros delitos asociados de mayor gravedad asociados, que les adicionan años de cárcel.
El caso más reciente es el de un enfermero de 76 años, de Magallanes, que fue sentenciado en 2013 a un total de 818 días de presidio -sin opción a beneficios- por interrumpir embarazos en reiteradas oportunidades. Su condena, que culmina en agosto de este año (ver infografía), es la única del registro de Gendarmería donde se sanciona específicamente el delito aborto. Eso, pues los cinco reclusos restantes tienen otros ilícitos incluídos en la pena, como homicidio, violación y abuso sexual, entre otros.
Las condenas se lograron porque en la legislación chilena esta práctica está penalizada (ver recuadro). Sin embargo, el abogado de Comunidad y Justicia, Ruggero Cozzi, dice que “la cifra es baja porque es un delito difícil de probar, sobre todo cuando se trata de una mujer que voluntariamente se practica un aborto. Actualmente, el aborto se practica en la casa donde una mujer, de forma ilegal, compra el medicamento Misoprostol para expulsar el feto. Si te fijas en el registro, no hay mujeres que estén cumpliendo pena por este delito”.
Agregó que “además, hay convenios entre el Ministerio Público e instituciones que rehabilitan a mujeres que se han sometido a abortos para que éstas tengan salidas alternativas, porque hay una realidad que no se dice en Chile, y es que el aborto voluntario genera secuelas psicológicas”. (La Tercera)