Desde su lanzamiento, el Telescopio Espacial James Webb (JWST) ha recibido el impacto de al menos 19 pequeñas rocas espaciales. Pero una pequeña roca en especial, un micrometeorito más grande de lo esperado, ha tenido un gran efecto en el recién operado telescopio de espacio profundo de la NASA.
Ahora, la agencia espacial ha publicado imágenes de los espejos de su telescopio, además de los primeros resultados de sus análisis. Anteriormente, en junio, la NASA había revelado el impacto del micrometeorito.
Aunque el tamaño de la partícula espacial era mayor de lo que el equipo había preparado, el daño está afortunadamente aislado en uno solo de los 18 espejos –en el espejo C3– del observatorio, como se ve en las imágenes incluidas en un nuevo y extenso informe de estado publicado en la base de datos de preimpresión arXiv.org.
Gran rendimiento del telescopio James Webb
Así, el impacto, que se produjo por un micrometeorito que golpeó el telescopio espacial James Webb probablemente entre el 22 y el 24 de mayo, dejó daños «no corregibles» en una pequeña porción de ese espejo, según el informe. Sin embargo, como reporta Live Science, esta pequeña abolladura no parece haber inhibido en absoluto el rendimiento del telescopio. De hecho, el rendimiento del James Webb está superando las expectativas «casi en su totalidad», afirmaron los investigadroes.
(El daño puede verse en la esquina inferior derecha de la imagen).
Aun así, los científicos de la NASA siguen tratando de calibrar el verdadero impacto que los impactos de micrometeoritos como éste podrían tener en las operaciones del observatorio, que, según el consumo de combustible, debería durar 20 años en el espacio.
Colisiones «coherentes con las expectativas»
Del mismo modo, los investigadores aseguraron que se preveía que los impactos de micrometeoritos fueran habituales mucho antes del lanzamiento del telescopio.
«Inevitablemente, cualquier nave espacial se encontrará con micrometeoritos», reza el informe. «Durante la puesta en marcha, los sensores de frente de onda registraron seis deformaciones superficiales localizadas en el espejo primario que se atribuyen al impacto de micrometeoritos».
Estas deformaciones se produjeron a un «ritmo de aproximadamente una por mes», según el informe, que es «coherente con las expectativas previas al lanzamiento».
Según reportes, durante la construcción del JWST, los ingenieros golpearon intencionadamente muestras de espejos con objetos del tamaño de micrometeoritos para comprobar cómo afectarían estos impactos al rendimiento del telescopio.
¿Modelos previos equivocados?
Ahora, los científicos están tratando de adelantarse al problema, investigando si la colisión del C3 fue un «evento raro» que ocurre «solo una vez en varios años», o si los modelos previos al lanzamiento estaban equivocados sobre la frecuencia de este tipo de impactos significativos.
A la espera de más análisis, y a pesar del inesperado impacto en el espejo C3, los investigadores comprobaron de todas formas que el telescopio está funcionando sin problemas tras los seis meses de puesta en marcha, y que tiene un brillante futuro de descubrimientos por delante.
El JWST fue concebido «para permitir avances fundamentales en nuestra comprensión de la formación y evolución de las galaxias, las estrellas y los sistemas planetarios», dice el informe. «Ahora sabemos con certeza que lo hará». (DW, Editado por Felipe Espinosa Wang.)