Toyota destinará otros US$ 8 mil millones a su planta de baterías de Carolina del Norte, en la mayor inversión de este tipo realizada por una automotriz extranjera desde que EEUU aprobó la Ley de Reducción de la Inflación (IRA, sigla en inglés) en 2022.
La financiación recién anunciada elevaría la inversión del grupo japonés en la planta -una de las mayores fuera de Japón- a unos US$ 13.900 millones para 2030. También añadiría unos 3 mil puestos de trabajo a la planta, a la que denomina el «epicentro de la producción de baterías de iones de litio en Norteamérica», con lo que el total ascendería a más de 5 mil.
La IRA, promovida por el Gobierno de Biden, incluye subvenciones por valor de US$ 370 mil millones para crear una cadena de suministro en EEUU para industrias ecológicas como la fabricación de vehículos eléctricos y baterías y descarbonizar rápidamente la economía estadounidense.
La legislación ya ha provocado una oleada de inversiones por parte de los fabricantes japoneses: Panasonic, Toyota, Honda, Bridgestone y otros han anunciado planes de gasto adicionales en Estados Unidos.(FT-DF)
