Durante la madrugada de este viernes, 45 ciudadanos extranjeros fueron deportados en un avión de la Fuerza Aérea de Chile (FACh).
Del total, 23 fueron debieron dejar el país por fallos judiciales, mientras que 22 fueron expulsados por causas administrativos.
Dicho vuelo despegó desde el Grupo 10 de la FACh -en Pudahuel- con las primeras 34 personas expulsadas. Posteriormente, el avión hizo escala en la base Los Cóndores en Iquique, donde abordaron las 11 restantes.
Desde ahí despegaron con destino a Bolivia, Colombia, Ecuador, República Dominicana y Haití.
El director del Servicio Nacional de Migraciones, Luis Eduardo Thayer, indicó que las personas que iban en el avión habrían cometido diversos delitos o faltas migratorias graves.
Entre ellas destaca el tráfico de drogas; porte, fabricación o tráfico de armas; ingreso por pasos no habilitados, entre otros.
El académico del Centro de Estudios Migratorios de la Universidad de Santiago, Byron Duhalde, analizó la expulsión de migrantes con antecedentes penales en el contexto de la crisis de seguridad nacional.
Según consignó el Servicio Nacional de Migraciones (Sermig) y la Policía de Investigaciones (PDI), solo hasta febrero, se han materializado 178 expulsiones: 97 administrativas y 81 judiciales. (Bio Bio)