El alcalde de Recoleta, Daniel Jadue (PC), descartó la existencia de una donación de insumos médicos, avaluados en 20 millones de pesos, por parte de Best Quality SpA, lo cual está al centro del caso Farmacias Populares, donde es investigado por el presunto delito de cohecho.
Según la autodenuncia del vendedor y comisionista del proveedor de la Asociación Chilena de Farmacias Populares (Achifarp), César Ramírez, el jefe comunal supuestamente solicitó la donación en 2020, «teniendo a la vista los negocios que se habían concretado con Achifarp», y se hizo entrega de la misma en la sede del Partido Comunista en Recoleta.
El Mercurio indicó que hace unos días, se alzó la reserva de la declaración de Jadue en calidad de imputado ante la Sección de Investigación de Lavado de Activos de Carabineros, diligencia que fue realizada en noviembre pasado y quedó plasmada en 15 páginas.
«No tengo información alguna de ninguna donación. En otras palabras, yo jamás pedí o recibí ninguna donación de nadie y no tengo información alguna acerca de algo similar», aseveró el alcalde en esa oportunidad, incluso apuntando que sólo conoció la existencia del proveedor debido a una deuda que la asociación mantenía con éste.
Respecto del litigio que mantienen Best Quality y Achifarp, advirtió que «me parece profundamente sospechoso que un acreedor prefiera liquidar forzosamente a un deudor en vez de dejarlo seguir operando para tratar de recuperar lo adeudado en el futuro, sobre todo si está en conocimiento de que el deudor posee deudas por cobrar que más que duplican la deuda contraída».
Asimismo, añadió que «llama profundamente mi atención las amenazas reiteradas de dañar una candidatura presidencial (campaña que emprendió en 2021) si el pago no se realizaba de inmediato, lo que parece más una extorsión que un intento de llegar a un acuerdo por el pago de una deuda».
En cuanto a la entrega de la presunta donación en la sede del PC en Recoleta, Jadue afirmó que desde que llegó al municipio, «abandoné todas mis responsabilidades partidarias en la comuna y me aboqué exclusivamente a mis responsabilidades como alcalde», y por lo demás, «nunca he manejado ni llaves de ese local, y entiendo que desde el inicio de la pandemia el local permaneció con muy poca actividad».
«Lo único que hay acá -planteó- es un proveedor de Achifarp que hizo tratos comerciales directa y única y exclusivamente con el secretario ejecutivo de la asociación, y que ante el atraso en los pagos comprometidos, decidió presionar de manera indebida mediante acciones judiciales infundadas para realizar daño a la persona del presidente de la asociación en su calidad de precandidato presidencial». (Cooperativa-El Mercurio)
