La comisión investigadora de la Cámara de Diputados mandatada para indagar las falencias del sistema de inteligencia y seguridad del Estado, a propósito del secuestro y asesinato del exteniente venezolano Ronald Ojeda, llegó a su fin y concluyó que detrás este crimen se encuentran agentes vinculados al régimen de Nicolás Maduro.
El presidente de la instancia, Miguel Ángel Becker (RN), finalizada la comisión sostuvo que «queda absolutamente claro que aquí en el ataque del secuestro, tortura y asesinato del teniente Ronald Ojeda, sí hubo participación de agentes externos, de agentes del gobierno del dictador Maduro de Venezuela, y que generaron entonces este hecho inédito de que una persona con refugio fuera asesinada en nuestro país».
Por otro lado, manifestó que «la ideología que tiene el actual Gobierno, la ideología de la migración desordenada, que es un tema que lo hemos venido viendo y comentando desde hace mucho tiempo, también queda muy claro».
«Creo que la comisión cumplió su objetivo, la votación fue bastante fuerte a favor de aprobar el documento que consta de más o menos 20 caras, y que esperamos que este informe sea tomado en consideración por parte de extranjería, por parte del Gobierno, y por parte de las Fuerzas Armadas para tomar medidas a propósito de lo que está ocurriendo. Hay una relación directa del Gobierno del dictador Maduro con el Tren de Aragua y con otros agentes que están actuando en el país, y eso Carabineros, la Policía e Investigaciones debe tomarlo en consideración», cerró el legislador.
Cabe destacar que el informe se aprobó con cinco votos a favor y dos en contra, siendo estos últimos de diputados oficialistas Matías Ramírez (PC) y Felix González (Ecologista Verde). Mientras que los legisladores Becker (RN), José Carlos Meza (Republicano), Francesca Muñoz (PSC) y Joanna Pérez (Demócrata), Leónidas Romero (RN), votaron a favor. Ahora, el documento debe ser visado por la Sala de la Cámara.
QUÉ CONCLUYERON
Además del vínculo con el régimen de Maduro, también concluyeron que «los Acuerdos de Cooperación Internacional deben ser un instrumento de utilidad recíproca y algo más que un decálogo de buenas intenciones».
En esa línea, se estableció que «la inocencia del Subsecretario del Interior al suscribir un acuerdo de cooperación policial con un autoritarismo reconocido, deja en evidencia la confusión del gobierno al abordar el combate al crimen organizado, y nos obliga a cuestionarnos nuestras alianzas regionales. Ciertamente se debe fortalecer la cooperación con otros países y organizaciones internacionales, pero no hay posibilidad de éxito si nuestra contraparte no tiene sanas sus credenciales democráticas».
En relación a las responsabilidades del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, la comisión sostuvo que «el fracaso y la gestión ideologizada del Servicio Nacional de Migraciones tiene como corresponsable al Ministerio del Interior y Seguridad Pública, quien podría introducir cambios en las jefaturas. Hay en efecto una línea directiva en el Servicio de Migraciones, desde su jefatura nacional, que es un obstáculo para cualquier política que busque de manera efectiva derrotar esta crisis migratoria y de seguridad».
Además, la instancia constató que «el fracaso en la protección de refugiados que acudieron al Estado de Chile en búsqueda de cobijo es una herida para un país que de antaño se ha considerado ‘el asilo contra la opresión’.
En esto tiene responsabilidad el Ministerio del Interior, no solo porque la protección de una u otra manera correspondía a organismos dentro de su esfera, sino porque en los últimos años se ha trivializado al figura del refugio como un mecanismo de permitir el acceso de migrantes con fraude evidente a la ley en tanto no se huye de la persecución política, sino más bien se buscan mejores alternativas laborales». (Emol)