El delegado presidencial del RM, Gonzalo Durán, abordó la mañana de hoy martes la eventual suspensión de clases de la jornada escolar a raíz de los posibles disturbios que se ocasionen por la conmemoración del 11 de septiembre.
En conversación con Radio Cooperativa, el representante del Ejecutivo en la región sostuvo que la idea de interrumpir la jornada escolar «no está resuelto aún, se está evaluando (pese a que) esa decisión no nos compete a nosotros, sino al Mineduc. Es una decisión que se tomará en las próximas horas».
Más tarde, Durán compartió un punto de prensa con la ministra del Interior, Carolina Tohá. En la instancia, ante la consulta sobre la evaluación de suspensión de clases señalada por el delegado, la secretaria de Estado afirmó «voy a dejar a él mismo que se refiere. Me parece mucho».
Según Durán, sus palabras apuntaban a la consulta sobre algunos establecimientos de la capital, que el año pasado dispusieron la suspensión de clases y en otros la realización de jornada de forma telemática. «Siempre hay que hacer una evaluación respecto de si esa medida es aconsejable o no, como una medida completamente excepcional y que, eventualmente, se podría ejecutar en algún punto en particular», agregó.
En ese sentido, sostuvo que «sin embargo, la regla general es que el 11 de septiembre sea una fecha de conmemoración y que sea una fecha de reflexión y que, en lo relativo al resto de las actividades, esperamos que la ciudad funcione con la mayor normalidad».
El diputado Diego Schalper (RN) emplazó a través de su cuenta de X al ministro de Educación, Nicolás Cataldo, «a desistir» de la idea de suspender las clases. «Es impresentable que los niños tengan que sufrir la incapacidad del Gobierno de brindar seguridad. ¡Basta! Que los niños vayan a clases es fundamental!», completó.
En tanto, María Teresa Romero, presidenta y fundadora del movimiento Escuelas Abiertas, señaló que «no podemos dejar que la violencia se siga haciendo costumbre, y perjudicar así a miles de familias y niños que necesitan normalidad y estabilidad».
«Ya van muchas suspensiones de clases este año, y por diversas razones. No dejemos que el miedo y la violencia nos sigan perjudicando. No nos sorprendamos después con el aumento de la deserción escolar, si con estas medidas la importancia del colegio y su rol en la sociedad están cada vez más desvalorizadas», agregó.
Tohá sostuvo que «considerando el 18 (Fiestas Patrias) más el 11 de septiembre, la cantidad de efectivos adicionales desplegados son 10.500, es decir, cerca de 2.000 de ellos están dedicados exclusivamente a la conmemoración del 11 de septiembre».
CRITICAS DE OPOSICIÓN
La posibilidad de suspender la jornada escolar en algunos establecimientos educacionales no cayó bien en la oposición. El diputado Cristián Labbé (UDI) manifestó que «lamentablemente el Gobierno está renunciando al derecho de los niños a poder tener sus clases como corresponde. Pareciera ser que está perdiendo la batalla contra o la delincuencia o el desorden público».
«El llamado al Gobierno es a ponerse en el lugar de los estudiantes, los padres, en un día como ese y condenar los hechos de violencia y sobre todo tomar los resguardos para que puedan estudiar», agregó.
Por su parte, el diputado y jefe de bancada de Evópoli, Jorge Guzmán, dijo que «el Gobierno se está acostumbrando a que por cada evento que pueda significar un hecho de violencia suspende clases, lo que nosotros debiésemos priorizar es entregarle paz y seguridad a los chilenos y no estar suspendiendo clases con el perjuicio que se produce para los estudiantes».
«Yo esperaría que el Gobierno planifique de buena forma que se desarrollen las manifestaciones de forma pacífica y que no tengamos que suspender clases y seguir perjudicando a los estudiantes de Chile», cerró.
Asimismo, el diputado Diego Schalper (RN) dijo que «le he planteado al ministro Nicolás Cataldo mi preocupación por siquiera pensar en suspender las clases a propósito del 11 de septiembre. En Chile se está haciendo frecuente suspender clases cuando el Gobierno es incapaz de controlar la seguridad. Lo hemos conocido a propósito de los llamados narco-funerales y ahora la segunda noticia es que la conmemoración de una fecha que efectivamente es conflictiva sería motivo suficiente para suspender las clases».
«Los niños no tienen por qué pagar la inoperancia del Gobierno en resguardar el orden público y la seguridad. Así que le exigimos primero al ministro Cataldo que se abstenga de una decisión como esa y en segundo lugar a la ministra Tohá y al Gobierno en general que le brinden seguridad a nuestros niños y niñas en el contexto de su educación», añadió.(Emol)