El subsecretario del Interior, Luis Cordero, abordó la regularización acotada que está estudiando el Gobierno para una parte de la población migrante que se sometió al proceso de empadronamiento biométrico.
Una medida que ha generado críticas tanto en la oposición como en parte del oficialismo por el presunto «perdonazo» que pueda radicar para los migrantes que han entrado al país por pasos no regulares, y que así genere un posible efecto «llamada» en tanto podría agudizar la problemática.
En conversación con Tele13 Radio, Cordero exhortó a llevar el debate sobre la regularización acotada «sobre los datos». «Las razones de seguridad interna son muy relevantes, porque no solo tenemos que saber dónde están, quiénes son, que es un antecedente, que el principio de quiénes son ya sabemos a partir del empadronamiento biométrico, sino que además cómo se localizan y cómo se distribuyen», sostuvo.
Además, explicó que el empadronamiento realizado por el Ejecutivo «no era el inicio de un proceso de regularización porque era una invitación a las personas a empadronarse. Una vez sobre esos datos, lo que ha hecho el Estado es observar esos datos, analizar, de hecho se han formulado una serie de encuestas, se ha trabajado también con otra serie de organizaciones, además el estudio del Banco Mundial y el Banco Interamericano y sobre eso se está evaluando la regularización acotada a este universo».
En esa línea, afirmó que «las personas que están empadronadas habitualmente no están involucradas con delitos. Los sicarios de la mafia no se empadronan, y no solo no se empadronan, no se empadronaron. Entonces, yo creo que lo primero que hay que hacer, como un esfuerzo de seguridad, y por eso el Ejecutivo ha dicho que hay dos argumentos de seguridad interna y económicos, es separar ese universo de aquellas personas que están cometiendo delitos y respecto de las cuales uno tiene que seguir aplicando la legislación migratoria».
Por lo demás, señaló que «esto además hay que asociarlo a otro aspecto también relevante. Hay dos proyectos de ley que el Ejecutivo ha estado promoviendo en el Congreso, uno, la ley miscelánea de migraciones, que lo que hace es la legislación migratoria mucho más estricta, y la segunda, la que faculta al subsecretario del Interior a requerir la participación y la búsqueda de policía por parte de la Policía de Investigaciones, incluyendo en recintos cerrados para aquellas personas que tienen decreto de expulsión».
Sobre el eventual efecto llamada que derivaría del proceso de regularización, Cordero insistió que «una de las características, de las buenas razones de poder discutir con datos y no con percepciones, es que los datos dicen otra cosa. El estudio del Banco Interamericano y el Banco Mundial lo que señala es que los procesos de regularización no producen el efecto llamada. O sea, esta idea del efecto llamada, yo invitaría a quienes lo sostienen que muestren los datos».
Dicho eso, indicó que «el 67% de las personas que están empadronadas ingresaron a Chile entre el 2018 y febrero del 2022. Ahí está ese universo significativo. Y lo segundo, es que el argumento del efecto llamada y la manera en que usted lo ha argumentado, descansan sobre la base de que estas personas tuvieran completa libertad de elección en el fondo, que es lo que no suele pasar en un caso de migración involuntaria, principalmente la diáspora venezolana».
«Yo logro entender los argumentos, las especulaciones, incluso los argumentos ideológicos de estos días, de todos quienes han escrito sobre este punto, a propósito del efecto llamada y otras más», afirmó, acotando que «no he encontrado ningún dato y yo la invitación que he hecho, es que si queremos discutir sobre este estudio en general que está haciendo el Ejecutivo respecto de este universo, yo creo que es conveniente que discutamos con datos y esos datos yo creo que son los que nos permiten distinguir una solución práctica de sesgos y prejuicios».
Con todo, el subsecretario aseveró que en este periodo «no va a haber un nuevo llamado a empadronamiento. Eso tendrá que valorarlo otra administración». (Emol)