El subsecretario del Interior, Luis Cordero, detalló la evaluación que está haciendo el Gobierno sobre realizar una regularización acotada sobre una parte de los migrantes que se sometieron al proceso de empadronamiento.
Una medida que el Ejecutivo estudia para un universo de 182 mil extranjeros, que ha generado reparos de la oposición -donde insisten que es contraproducente con la agenda de seguridad y que generará un efecto «llamada»- como también en parte del oficialismo.
En conversación con CNN Radio, Cordero defendió la iniciativa argumentando que tiene una «razón de seguridad interna, y esto ni es perdonazo ni es buenísimo, ni nada parecido. Es una cuestión estrictamente práctica para el funcionamiento de la seguridad». «Hay que sacarse de la cabeza que esto es un perdonazo o que esto es buenismo. Esto es resolver un problema concreto que tiene el país, que si no lo resuelve ahora, va a tener que resolverlo más adelante, sí o sí».
Sobre el universo sobre el que se piensa aplicar la medida, el subsecretario señaló que «esas 182.000 personas son personas susceptibles de postular, que no significa que las 182.000 estén en condiciones de ser regularizadas, y eso va a depender del conjunto de requisitos que el Ejecutivo está estudiando, que puedan ser exigibles, y por lo tanto, puede ser un procedimiento muy estricto, puede ser un procedimiento de exigencia».
En el marco de la conversación, afirmó que el total, «si uno la caracteriza, tiene cerca un tercio de esas personas con estudios superiores. La mayoría de esas personas están en edades productivas, son entre 24 años a un poco a treinta y tantos años. La mayoría de ellos trabaja. Ojo con eso, hay muchos de ellos que ya están trabajando en el país, de hecho tienen contratos de trabajo y son personas que además cotizan en el sistema previsional chileno, una cantidad importante de ellos. Sin embargo, no pueden acceder a una Cuenta Rut, por lo tanto, quedan expuestos a terceros, sea porque están expuestas a la comisión de delitos en contra de ellos, sea porque pueden ser impulsados a la comisión de delitos por los mismos».
Ahora bien, indicó que «de esas 182.000 personas que se empadronaron, al menos 200 no van a poder postular, porque de nuevo el proceso de empadronamiento, se pudo detectar que tenían antecedentes».
En otra arista, el subsecretario fue requerido por los problemas que se generan en la contratación de extranjeros durante la época de cosechas, el subsecretario aseguró que «el sector privado es uno de los partidarios de generar un mecanismo de regularización acotada».
«En el caso de la agricultura en particular, esta es la época de cosecha, no es que se pueda acceder necesariamente a mano de obra más barata, es que hay problemas de acceso a mano de obra en la actualidad para las cosechas en varios sectores del sector agrícola. Entonces tenemos un problema de acceso a mano de obra«, afirmó.
PERU
Asociado a la regularización, la autoridad también fue consultada por la medida que adoptó Perú de expulsar a extranjeros que no se identifiquen, y la agudización de la migración irregular que esto podría generar en el país.
«Lo que está haciendo Perú es algo similar a lo que está haciendo Chile, porque la Presidenta lo que ha anunciado, además, es el empadronamiento biométrico. Eso es lo que ha anunciado Perú, yo tengo la impresión que Perú está siguiendo más bien la ruta que previamente siguió Chile».
Dicho eso, informó que «nosotros, desde el año 2022 hasta la fecha, tenemos poco más de 13.000 reconducciones. Nosotros, en la actualidad, estamos conversando con Bolivia para tener un acuerdo en este sentido. Forma parte de las conversaciones que está teniendo tanto el ministerio del Interior como la Cancillería con el Estado boliviano».
Ahondando ese punto, sostuvo que «Chile tiene mecanismos de reconducción. Los mecanismos de reconducción con Perú funcionan relativamente bien. No quiero hablar de la situación de Perú en particular, pero tiene otro problema que está asociado a su frontera norte, esencialmente, en el fondo. Pero nos vemos nosotros, por ahora, o por lo menos desde el punto de vista del trabajo que tiene el equipo de frontera norte de las Fuerzas Armadas, un indicador que eso pudiera afectar».
En cuanto a si puede descartar aglomeraciones en el norte, el subsecretario indicó que «nosotros lo que tenemos es una evaluación. Yo de hecho estuve hace unas semanas allá en un control fronterizo muy férreo, en el caso de Arica ha funcionado bastante bien, eso ha generado incentivos a ingresos irregulares por la zona del altiplano donde también las Fuerzas Armadas han ido estableciendo mecanismos dinámicos de control de la frontera».
«Además de eso el país está invirtiendo significativamente en el sistema tecnológico para la custodia de la frontera. Ahora esto es un desafío que tiene Chile y que tienen buena parte de los países con migraciones irregulares involuntarias en el mundo», adujo. (Emol)
