Junto con esto, la ofensiva gremialista solicita que se “informe si con ocasión de los referidos trabajos de apoyo a la defensa judicial de la señora Compagnon, usted procedió al pago de honorarios a profesionales por la ejecución de estos servicios”.

Esto último, aludiendo a supuestos desembolsos que habrían recibido de parte de La Moneda los abogados Jessica Norambuena y Felipe Polanco, quienes fueron parte del equipo defensor de la nuera de la Mandataria antes de que el SII se querellara en su contra, lo que derivó en su posterior formalización.

La solicitud se da luego que la propia Compagnon señalara en La Tercera que “no descarto” que La Moneda haya tenido un rol clave durante la primera etapa de su proceso judicial.

A lo que agregó: “A mis antiguos abogados y a Isidro Solís les importaba que yo no hablara con la prensa, que siguiera estrictamente el camino judicial en esto, que ojalá salpicara lo menos posible al gobierno, siempre la idea fue separarme de La Moneda”.

A dichas acusaciones se suman las que realizó el actual abogado defensor de Compagnon, Antonio Garafulic, quien el 9 de abril -en entrevista con El Mercurio- indicó que “la estrategia de antes era de contención y que medianamente se guardara silencio, de mantener bajo perfil y de permitir que personas del segundo piso de La Moneda se metieran directamente en la causa o directamente con los abogados de la causa (Norambuena y Polanco)”.

Esto, junto con agregar que él nunca participó de la “estrategia” de la defensa, señalando que esto fue realizado por los abogados “impuestos por La Moneda, el discurso jurídico vino de allá”.

“La Moneda la dejó caer (a Compagnon) a costa de que la Presidenta suba en las encuestas”, añadió en esa ocasión, provocando que el diputado Ignacio Urrutia (UDI) enviara otro oficio a Presidencia con el fin de develar la vinculación de Palacio con ese proceso judicial.

Junto con apuntar al supuesto rol coordinador de Uriarte, desde la oposición el presidente de la UDI y vocero de Chile Vamos, Hernán Larraín, indicó ayer que “preocupa que Natalia Compagnon señale que ella ha sido víctima y que directa o indirectamente involucre a La Moneda y el segundo piso en esta materia”.

“Nos parece grave que La Moneda aparezca enredada en este tema y esperamos que se transparente la verdad de lo que ahí está ocurriendo en todas las acciones que haya tenido el segundo piso y quienes sean de La Moneda respecto del caso Caval”, dijo en la misma línea y enfatizó: “Aquí pareciera haber gato encerrado, en consecuencia es hora de la verdad y el gobierno tiene que transparentar su acción en este caso”.

En paralelo, el diputado y presidente de RN, Cristián Monckeberg, mencionó que “para despejar toda duda sería prudente que Ana Lya Uriarte aclare su rol en la defensa de Compagnon y si se efectuaron pagos a los abogados”.

Vocero no descarta

Luego de los dichos de Compagnon, en el Ejecutivo optaron por no ahondar en la materia reiterando que el gobierno no se referirá a investigaciones judiciales.

Así, consultado varias veces sobre los supuestos pagos de Uriarte a Polanco y Norambuena, el vocero Marcelo Díaz dijo que “nosotros ya nos hemos referido en montón de ocasiones de estos temas. Si hay algo que corresponde es respetar, reitero, las investigaciones que hacen los fiscales”, sin descartar las acusaciones de la oposición.

El supuesto rol que tuvo Uriarte de la defensa de Compagnon se suma otros dos hechos que han marcado su relación con el caso Caval.

Se cuentan los pagos que recibió desde Caval a raíz de informes medioambientales de los cuales, según declaró Mauricio Valero ante la fiscalía, no habría respaldos, lo que fue descartado por Uriarte.

También está la declaración del ex administrador de Palacio Cristián Riquelme, quien señaló que Uriarte le habría solicitado toda la información que entregaría a fiscalía, momento en el que le habría informado de una reunión que sostuvo con el operador Juan Díaz en abril de 2015.