“Antes había una gran escuela, la Escuela de las Américas, donde los mejores alumnos de las Fuerzas Armadas y la policía iban allá a ideologizarse, es un derecho, (lo) respetamos, pero también nosotros tenemos otra escuela, no del imperio, sino del pueblo, una escuela ideológica, programática para revisar la historia (de) cómo los pueblos de América Latina y el mundo han sido sometidos”.
Con estas palabras anunció el presidente de Bolivia, Evo Morales, la inauguración de la Escuela Antiimperialista de los Pueblos de Abya Yala y de las Fuerzas Armadas en una rueda de prensa celebrada en La Paz a mediados de julio. El nuevo centro militar de la “tierra americana”, que es lo que significa Abya Yala en la lengua del pueblo kuna, se llamará Juan José Torres en honor al militar de izquierdas y expresidente boliviano (1970-1971). El término Abya Yala, como apunta el antropólogo Carwil Bjork-James, de la Universidad Vanderbilt, significa además los dos continentes de América y su uso se ha generalizado en el movimiento indígena de América Latina.
Bjork-James cree que esta nueva iniciativa impulsada por Evo Morales forma parte de un largo proceso de reorientación del Estado boliviano como país plurinacional, crítico con la política exterior de Estados Unidos y alineado geopolíticamente con gobiernos de izquierda en la región. “Esta Escuela Antiimperialista de los Pueblos del Abya Yala sigue el ejemplo de nuevas instituciones de formación dentro del gobierno boliviano, como la Academia Diplomática Plurinacional, que combinan formación política con capacitación”, dice el antropólogo.
ESCUELA DE LAS AMÉRICAS
Fundada en Panamá en 1946 con el nombre de Latin American Training Center – U.S. Ground Forces, la Escuela de las Américas que mencionó Morales en su discurso era una organización de instrucción militar del ejército estadounidense en la que se formaron más de 60.000 militares y policías de 23 países de América Latina, entre ellos algunos tan célebras como Omar Torrijos (dictador de Panamá entre 1969 y 1981), Manuel Contreras (jefe de la DINA chilena durante la dictadura de Augusto Pinochet), Leopoldo Fortunato Galtieri (dictador argentino entre diciembre de 1981 y junio de 1982), Manuel Antonio Noriega (dictador panameño en el período 1983-1989) o Vladimiro Montesinos (exagente de la CIA y asesor presidencial del peruano Alberto Fujimori).
Ya en 1984 fue trasladada a Fort Benning, en el estadounidense estado de Georgia, en cumplimiento de los Tratados Torrijos-Carter sobre el Canal de Panamá. El expresidente de Panamá Jorge Illueca (13.02.1984 – 11.10.1984) la describió en su día como “la base más grande para la desestabilización en América Latina”.
Evo Morales: «Los mejores alumnos de las Fuerzas Armadas y la policía iban a la Escuela de las Américas a ideologizarse».
Para el exministro de Defensa chileno Francisco Vidal Salinas la iniciativa de Morales llega 20 años tarde “porque ya no existe la Escuela de las Américas”. En entrevista con DW, Vidal considera que “las fuerzas armadas, por su naturaleza, no deben ser ni de izquierdas, ni del centro, ni de derechas, y tienen que estar al servicio del país”.
CURSOS SOBRE «ANTI IMPERIALISMO»
La escuela impulsada por el presidente boliviano no es la primera de este tipo que surge en América Latina. En agosto de 2014, los ministros de Defensa de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) acordaron la creación de la Escuela Suramericana de Defensa (ESUDE), con el objetivo de afianzar el concepto de Fuerzas Armadas democráticas, respetuosas del Estado de Derecho, en toda Latinoamérica. Con sede en la Mitad del Mundo, Ecuador, fue inaugurada en 2015 y está previsto que los cursos académicos presenciales y virtuales de la Escuela empiecen en este año 2016.
La idea de crear la nueva escuela militar surgió en 2015, año en el que Evo Morales propuso que los tenientes del ejército boliviano que desearan ascender al grado de capitán deberían pasar previamente cursos sobre “antiimperialismo”. Con ese fin, decidió crear la institución en Santa Rosa del Paquío, en el Departamento de Santa Cruz, donde antes había un centro de entrenamiento para misiones de paz de la ONU.
En la opinión de Bjork-James, uno de los objetivos de la escuela antiimperialista podría ser acelerar el proceso de formación de nuevos militares de extracción indígena en una profesión tradicionalmente limitada a la población blanca y mestiza, y de clase alta.
El ministro de Defensa de Bolivia, Reymi Ferreira, anunció que en la escuela se impartirán materias como «Teoría del Imperialismo, Geopolítica del Imperialismo, Geopolítica de los Recursos Naturales y Estructura Social Boliviana». El miércoles, en el Departamento de Santa Cruz, la Escuela Militar Antiimperialista empezará a capacitar a militares bolivianos y de los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA). Un acto que contará con la presencia de los ministros de Defensa de Nicaragua, Martha Ruiz Sevilla, y de Venezuela, Vladimir Padrino López. (DW)
