El Papa Francisco admitió que “existe corrupción en el Vaticano, pero estoy en paz. Si existe un problema, escribo un mensaje a San José y lo pongo bajo una estatuita que tengo en mi habitación”.
Francisco lo declaró en una entrevista a la revista de los jesuitas, Civiltá Cattolica, anticipada por el Corriere della Sera.
Sobre los abusos sexuales, explicó: “Si están implicados religiosos, es claro que está en acción la presencia del diablo que arruina la obra de Jesús, a través de los que debían anunciar a Jesús”.
“Pero hablemos claro: esta es una enfermedad. Si no estamos convencidos de que esta es una enfermedad no se podrá resolver el problema”, agregó.
Por otra parte, el Papa sostuvo que “el Evangelio debe ser tomado ‘sine glossa’, es decir sin calmantes… Cuando novicio me dieron el silicio. El silicio está bien, pero atención, no debe servir para demostrar cuán fuerte se es”.
“Estoy viviendo -subrayó, a propósito del pontificado- una experiencia totalmente nueva. No tomo pastillas calmantes. Los italianos dan un buen consejo: para vivir en paz es necesario una sana indolencia”. (La Tercera-Ansa)