Hace un mes la relación entre el Ministerio de Educación y los rectores de universidades estatales y privadas pasaba por uno de sus mejores momentos, ya que ambos grupos se sentían escuchados por el Ejecutivo en los cambios que se estaban preparando a la reforma a la educación superior.
Sin embargo, ahora un nuevo episodio vuelve a tensionar la relación entre los rectores y el Mineduc. Se trata del acuerdo al que llegó el Gobierno con la U. Católica para que ésta desistiera de la demanda que había interpuesto contra el Estado, luego de que el Ejecutivo decidiera eliminar el Aporte Fiscal indirecto (AFI) a través de una glosa del Presupuesto 2017, mientras aún estaba vigente la ley que lo asignaba.
El acuerdo al que llegaron establece que se entregará, por única vez, un fondo de $2 mil millones que se distribuirán entre las universidades que recibían el AFI, al tiempo que se enviará una ley para eliminarlo. Además, se abrirá un nuevo fondo concursable para las universidades de excelencia, que ascendería a $3 mil millones.
Las principales universidades que se verán beneficiadas con esta medida son, junto con la U. Católica, la U. de Chile, la U. de Concepción, la U. Adolfo Ibáñez y la U. Diego Portales.
DURA CRÍTICA DEL RECTOR DE LA U. DE CHILE
Sin embargo, pese a que el acuerdo les entrega recursos a sus universidades, algunos rectores criticaron la negociación entre el Gobierno y la UC. El más duro fue el rector de la U. de Chile, Ennio Vivaldi, quien sostuvo que éste es «una burla para las universidades que han estado privadas de cualquier fondo».
«Se ve muy feo que se haga una movida para darle más aporte a ciertas universidades y se deje fuera a las que más lo necesitan», subrayó.
Sostuvo además que la forma «como se ha llevado a cabo la negociación es, por decir lo menos, curiosa, y a uno lo deja con muchas dudas». En ese sentido, criticó no haber sido invitado a las conversaciones, pese a que su universidad era la que más AFI recibía, y aseguró que, si hubiese estado, habría pedido un fondo para las instituciones que más lo necesitan.
También afirmó que el cardenal Ricardo Ezzati, quien es gran canciller de la UC, incidió en las negociaciones. «Si funcionó llevar al arzobispo, me pregunto de qué equipo de fútbol es hincha el ministro de Hacienda, así nosotros lo amenazamos con no dejarlo entrar al estadio si es de la U», afirmó.
Esto último fue descartado de plano por el rector de la UC, Ignacio Sánchez, quien afirmó que es «completamente falso». «El cardenal Ezzati no ha estado involucrado en estas conversaciones y no correspondía que lo hubiera estado (…) Increpo al rector Vivaldi para que dé a conocer la fuente y la evidencia que tiene, y por qué quiere confundir a la ciudadanía», agregó.
El acuerdo también fue criticado por el rector de la U. Diego Portales, Carlos Peña, quien dijo a «El Mercurio» que «es del todo anómalo que el Gobierno se obligue con un particular a presentar un proyecto».
«Si, como dijo el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, era de la máxima gravedad judicializar una decisión de política pública como la supresión del AFI, lo es de mayor gravedad que el mismo ministro comprometa un proyecto como parte de una conciliación judicial o como resultado de un litigio», afirmó.
«¿Acaso se pretende conferir a los litigios judiciales la capacidad de iniciar proyectos de ley? Si ya hubo signos de que la reforma universitaria se estaba diseñando por el Mineduc como si fuera una negociación corporativa con el Consejo de Rectores, ahora resulta que el Gobierno está dispuesto a negociar proyectos con instituciones en particular. Todo esto no es razonable y exige una reflexión bastante más allá de la cuestión presupuestaria», agregó.
ALGUNAS UES SÍ RESPALDARON EL ACUERDO
En cambio, hubo rectores de otras instituciones que valoraron el acuerdo al que llegó la UC y el Estado. Uno de ellos es el rector de la U. de Concepción, Sergio Lavanchy, quien afirmó a Emol que «me parece bien que, si hubo un error, el Gobierno reconozca ese error y lleguen a este acuerdo» y dijo que el anuncio del Gobierno de que enviará una ley para eliminar el AFI «es el camino jurídico que corresponde».
También calificó como «positivo» y una «buena señal» el nuevo fondo concursable que abrirá el Mineduc para las universidades de excelencia.
En tanto, el rector de la UC de Valparaíso, Claudio Elórtegui, planteó que «es muy valorable que situaciones de desencuentro se puedan resolver a través del diálogo» y sostuvo que el acuerdo es un ejemplo de que «las cosas no se habían hecho como se tenían que hacer». (Emol)