«Me permito salirme de la presentación, ministro. Pienso que la frase respecto de los poderosos de siempre fue muy desafortunada». Así enfrentó Alfredo Moreno al ex titular de Hacienda Alberto Arenas, durante su intervención en Enade 2014, en medio del proceso de reformas que implementó la actual administración en sus primeros meses de gobierno.
«No hay economía sana con una política enferma, si no tenemos líderes como los que hemos tenido en los últimos 30 años, créanme que ni las mejores empresas ni los mejores empresarios van a poder obtener que este progreso de Chile continúe en los años siguientes», añadió, previo a recibir una ovación del empresariado presente esa mañana del 27 de noviembre en Casapiedra.
Fue en esa ocasión cuando algunos de los hombres de negocios más importantes del país lo vieron como una carta potente para presidir la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), que en marzo del siguiente año debía elegir al reemplazante de Andrés Santa Cruz en el sillón principal de la casona de Monseñor Sótero Sanz.
En los días siguientes, un grupo de empresarios -principalmente ligados al comercio y la banca- comenzó a sondear su nombre entre algunos de los consejeros de las seis ramas de la CPC en la búsqueda de un consenso para su elección, pero a esa altura la carrera ya estaba corrida en favor del entonces presidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami) y actual presidente de la CPC, Alberto Salas.
Dos años después la situación es distinta y el ex Canciller irrumpió en una competencia que tenía, hasta esta semana, como actores principales al presidente de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Hermann von Mühlenbrock, y al líder de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Ricardo Mewes.
GESTIÓN EN PENTA: ESTABILIZÓ EL EQUIPO
Ese mismo año, tras abandonar su cargo de canciller en el gobierno del ex Presidente Sebastián Piñera, Moreno había asumido un importante desafío en el grupo Penta, en medio de los escándalos en que se vio envuelto el holding encabezado por Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín. De hecho, al momento de su ingreso, el SII ya había iniciado la investigación sobre el fraude al FUT y financiamiento irregular de campañas políticas.
A fines de diciembre de 2014 y con la certeza de que estaban cerradas sus opciones en la CPC, fue elegido presidente de Empresas Penta.
Durante su gestión en el holding se concretó la venta de los activos de Banco Penta. En julio de 2015, Banco de Chile adquirió su cartera comercial en US$ 911 millones. En tanto, Banco Security se hizo de la cartera privada, la administradora general de fondos (AGF ) y la corredora de bolsa en otros US$ 30 millones. Asimismo, se enajenó el 70% que la firma poseía en Penta Security a Liberty, en US$ 162 millones. Con estas operaciones, el grupo quedó con dos de sus principales actividades: el negocio de la salud privada, donde mantienen un 28,74% de la propiedad de Banmédica y Penta Inmobiliaria.
Desde el sector privado califican la gestión de Alfredo Moreno en Penta como «brillante», logrando mantener a flote al grupo empresarial, pese a los problemas que enfrentaba. «Él tenía un compromiso con Penta y lo honró, teniendo en cuenta la difícil situación de las empresas en las que se podían perder miles de empleos. En muy poco tiempo logró vender el Banco Penta y logró estabilizar al resto de las empresas del holding . Actualmente, las tiene funcionando sin ningún impacto para el país y la economía», reconoce el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Patricio Crespo.
En este escenario, su nombre volvió a dar vueltas en la cabeza de algunos empresarios para representarlos a partir del próximo año en la presidencia de la CPC. Al interior de los gremios que conforman esta multigremial sindican a Crespo como el gran impulsor de su campaña, señalando a Moreno como una figura con amplias redes, que destaca por su conocimiento del mundo público y privado, adquirido en su paso por instituciones tan diversas como la Fundación Teletón, Icare y en el Ministerio de Relaciones Exteriores.
LAS DUDAS ANTES SU PASO POR GOBIERNO DE PIÑERA
Sin embargo, el rol ejercido en el ámbito político durante el gobierno de Sebastián Piñera genera algunas dudas en el empresariado. Mientras sus promotores resaltan su trabajo como canciller, principalmente por el afiatamiento de las relaciones comerciales con los países de la Alianza del Pacífico, hay otros círculos que ven que su paso por el gobierno de Sebastián Piñera lo marca políticamente, lo que podría ser una desventaja.
Ricardo Mewes, de hecho, admitió que en la reunión que sostuvieron el pasado lunes, en la que se comenzó a fraguar el apoyo definitivo de la CNC luego que el propio Moreno le señalara que ya contaba con el apoyo de otras cuatro ramas de la CPC, le hizo saber sus aprensiones por las críticas de las que sería objeto la Confederación al tener un líder ligado al pasado gobierno, considerando que el primer año de su mandato coincidirá con el último de la Presidenta Bachelet. Sin embargo, el dirigente del comercio dijo creer que «tiene la muñeca para manejarlas».
«En su rol como ministro de Relaciones Exteriores tuvo muñeca para ejercer una función tremendamente importante en las relaciones con Perú y Bolivia. Creo que el hombre tiene las condiciones y tiene la llegada al gobierno de la Presidenta Bachelet en este año que es importante. En lo que queda de gobierno pueden discutirse cosas muy importantes, además tiene llegada al mundo político en general y creo que son elementos que también avalan su experiencia», agregó Mewes.
Entre los desafíos que tendrá Moreno en la CPC está el de recomponer los vínculos entre la sociedad y los empresarios. «En la sociedad están nuestros colaboradores, nuestros clientes de bienes y servicios, y esa relación no puede estar quebrada por desconfianzas y situaciones que nos han afectado en el último tiempo», manifiesta Patricio Crespo.
Asimismo, desde la Confederación admiten que deberá enfrentar la discusión de los cambios que se busca realizar al sistema de pensiones, la implementación de la reforma laboral, la discusión de modificaciones al Código de Aguas y la reforma a la Constitución, con la Presidenta Bachelet en su último año, y un escenario electoral completamente abierto.
Por ahora, solo resta conocer si la Sofofa mantendrá en pie la candidatura de Von Mühlenbrock para conseguir el consenso de las seis ramas de la CPC, tema que podría quedar definido tras la reunión que sostendrá mañana el ex canciller con el líder del gremio industrial. (El Mercurio)
