El fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido (en la fotografía), se refirió esta jornada a las amenazas de muerte que recibió un testigo durante el juicio que se desarrolla en el Tribunal Oral de Angol por el homicidio del suboficial Francisco Benavides.
El persecutor señaló que «la persecución de la criminalidad organizada genera este tipo de dificultades: amenaza en contra de los testigos, en contra de las víctimas. En este caso, lo podemos constatar durante el desarrollo del juicio».
Además, indicó que también se hicieron amenazas a través de redes sociales «en contra de otro testigo y víctima también de los hechos que están siendo materia de juzgamiento», sostuvo Garrido.
«Cuando se producen estas situaciones, no solo se inicia una investigación, sino que también afecta gravemente el desarrollo y la posibilidad de juzgamiento de un hecho. Es por eso también que nos parece que la dilación de las audiencias está muy vinculada también con el amedrentamiento y el cansancio que se persigue hacia los testigos o a quienes tienen información relevante que entregar a los tribunales», completó.
La lectura del veredicto de la causa se realizará hoy, y la Fiscalía pide presidio perpetuo calificado para uno de los acusados, y penas que suman 27 años de cárcel para los otros dos. (Emol)
