Tras la salida de Giorgio Jackson del ministro de Desarrollo Social, analistas debaten sobre la posición que este nuevo escenario ofrece al Ejecutivo.
Al respecto, el sociólogo y director de Túinfluyes, Axel Callís, afirmó que lo de Jackson «no agudiza (la crisis del Ejecutivo) y tampoco se transforma en una oportunidad. Lo que hay es que se transforma en un símbolo la salida de Giorgio Jackson».
«Yo creo que no es la salida de un ministro, es la salida del ideólogo de este Gobierno. O sea, esta es una salida fundamental en el Gobierno, por eso no sale un ministro, sale el ladrillo que dio origen a este Gobierno, en términos de proyecto, el que diseñó la campaña, el que diseñó la estrategia de Revolución Democrática con Beatriz Sánchez. Es decir, en cada uno de los peldaños de crecimiento del Frente Amplio está Giorgio Jackson con Gabriel Boric y Camila Vallejo, pero él es el hombre del diseño. Entonces, de alguna u otra forma, sale el autor intelectual de este Gobierno«, sostuvo.
A su vez, el académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, consideró que esta «es una oportunidad para descomprimir el ambiente, pero claramente es insuficiente». «Lo que se debiese producir ahora es una mayor profundización en las investigaciones producto de los casos de corrupción derivados del accionar de algunas fundaciones y por otra parte, que el Gobierno logre ceder en algunas posiciones respecto a la reforma tributaria y la reforma previsional. De lo contrario, todo esto va a terminar en un nuevo colapso referido al bloqueo que va a tratar de imponer la derecha sobre el Gobierno en estas dos reformas que son muy relevantes«, comentó.
Y añadió: «La oposición sabe que si bloquea ambas reformas, entonces la cuenta pública del Presidente el próximo año va a ser más un muro de los lamentos que una cuenta propiamente tal, porque el Presidente se va a dedicar a explicar por qué no consiguió los objetivos trazados en esa cuenta pública en lugar de dar a conocer los avances de su gestión».
Por su parte, el abogado e investigador del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES) Rodrigo Pérez de Arce, indicó que para el Ejecutivo «el golpe es durísimo, porque el escándalo de los convenios toca la médula de su actitud política y moral. Además, como todas las semanas aparecen nuevos antecedentes, no daría por hecho que con esto retoman el control de la agenda, aunque sí puede darle algo de aire. En todo caso, debe actuar rápido o se esfumará esa pequeña oportunidad».
Respecto a si apuntala la crisis o genera una oportunidad, el director ejecutivo del IES, Claudio Alvarado, afirmó que «ambas cosas. Desde luego es un tropiezo más de la generación que venía a rehacerlo todo, pero también puede ser una oportunidad. Aprovecharla supone que el Presidente Boric y su equipo actúen con mesura y sobriedad».
En la línea de Pérez de Arce, el analista político y académico de la Universidad Autónoma, Tomás Duval, indicó que la dimisión del ministro «es un duro golpe para el Gobierno, porque en específico (Jackson) es de los fundadores del Frente Amplio y naturalmente es una figura muy importante, en que el actual Presidente logra un triunfo en las elecciones presidenciales y por lo tanto, es una figura política rutilante dentro del Frente Amplio».
«Fue capaz de armar un partido como Revolución Democrática y levantar candidaturas presidenciales como fue Beatriz Sánchez, que fue una gran candidatura presidencial en su momento. Desde esa perspectiva, es un golpe muy duro para el Gobierno», enfatizó y advirtió que «yo tengo ciertas dudas respecto a si efectivamente esto va a descomprimir el escenario político«.
«Me parece que se puede descomprimir porque se había transformado en una suerte de objeto para la oposición el ministro Jackson, pero esa posibilidad tiene dos perspectivas: primero los casos de corrupción me parece que pueden seguir apareciendo y el Ministerio Público está investigando en casi 11 o 12 regiones de Chile, entonces por esa vía me parece que pueden seguir apareciendo casos y complicando también al Gobierno, y por otra parte, vamos a ver cuál es la actitud o la forma en que la oposición va a enfrentar este minuto», reflexionó.
Y agregó: «Me parece que la oposición no va a actuar rápida ni inmediatamente. Si toma una decisión estratégica, creo que no va a ser en lo inmediato y va a esperar para tomar una decisión sobre cuáles son las políticas en las que va a avanzar». «La pregunta que yo me hago es ¿está dispuesta la oposición a entregarle el logro de las pensiones al Gobierno en este momento político?» acotó. (Emol)