Luego de varios años de una Iglesia católica más bien silente frente a los temas valóricos –a partir de la avalancha de acusaciones en contra de distintos sacerdotes por abusos sexuales–, el arribo de Fernando Chomali al Arzobispado de Santiago no tardó en mostrar que el nuevo líder de la otrora poderosa institución llegó dispuesto a reposicionarla en esas materias.
La primera señal urbi et orbi al respecto la dio el 1 de junio pasado, después que el Presidente Gabriel Boric diera a conocer el envío de proyectos de ley sobre aborto y eutanasia, tras lo cual Chomali dijo que “ambas leyes eliminan seres humanos inocentes”, aseverando después –en una conversación con Emol TV– que lo anunciado por el Mandatario “no me sorprendió”, pues, dijo, “todo su sector hace mucho tiempo que está promoviendo el aborto libre y, por lo tanto, forma parte de su programa político”, junto con agregar que “el aborto siempre va a ser un acto inmoral, porque atenta contra la vida de un ser humano inocente”.
Su último embate al respecto se produjo el miércoles, en un conversatorio online titulado “Reflexión en torno al aborto y eutanasia”, organizado por la misma Iglesia, en el cual afirmó que en una violación “el inocente paga la irresponsabilidad de otro y eso no puede ser” y que “el aborto es una solución fácil, un acto de violencia que termina con un ser humano inocente”.
En la introducción, el arzobispo dijo que la sociedad es muy frívola y superficial, aseverando que de fondo hay un tema de fe: “Creemos nosotros que somos creados a imagen y semejanza de Dios, pero también a través de la razón podemos reconocer que no es razonable optar por el aborto bajo ningún punto de vista, así como tampoco la eutanasia”.
Asimismo, luego de relatar que su madre estuvo dos años con un cáncer de estómago y que ellos (los hijos) nunca pensaron en la eutanasia, argumentó –leyendo un documento de la Doctrina de la Fe- que “la súplica de los enfermos muy graves que alguna vez invocan la muerte no debe ser entendida como expresión de una verdadera voluntad de eutanasia. Estas, en efecto, son casi siempre peticiones angustiadas de asistencia, además de cuidados médicos. Lo que necesita el enfermo es el calor humano y sobrenatural con el que pueden y deben rodearlo todos aquellos que están cercanos”.
Los comentarios de Chomali, que fueron replicados en una nota de CNN Chile, generaron una serie de reacciones en redes sociales.
Delia Vergara, periodista y fundadora de la revista Paula, fue una de las más duras. En su cuenta de X dijo que “me da rabia este arzobispo que mete su cuchara en asuntos que incumben a las mujeres y se queda bien callado sobre los innumerables abusos que han cometido sus colegas contra jóvenes y sí, también mujeres”.
Ayer, en tanto, Chomali publicó una carta en El Mercurio, criticando el spot del Minsal sobre donación de órganos, respecto del cual dijo que “un gesto tan noble y bello como donar un órgano para dar la vida no se logrará mostrando algo tan feo como unos gusanos devorando un cadáver”. (El Mostrador)