Candidato a Contralor Enrique Rajevic podría ser rechazado en el Senado

Candidato a Contralor Enrique Rajevic podría ser rechazado en el Senado

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La Presidente Michelle Bachelet propuso al académico y cercano a la DC, Enrique Rajevic, para ocupar el cargo de contralor general de la República, el que está vacante desde el 12 de abril.

Mediante un oficio presentado al Senado, se solicita el acuerdo de la Sala para el sucesor de Ramiro Mendoza, que dejó la dirección de este organismo tras su última cuenta pública de su gestión.

Rajevic es licenciado en Derecho de la Universidad Católica y Master en Política Territorial y Urbanística y Doctor en Derecho de la Universidad Carlos III de Madrid.

También ha impartido clases en la Universidad Alberto Hurtado, donde se señala que sus áreas de interés preferente son el Derecho Urbanístico y la Gestión Pública, desarrollándolas a través de la academia, el trabajo en el sector público y la consultoría particular. Desde

Ha impartido clases, además, en diversos postgrados. En la Administración Pública ha sido asesor en el Comité Interministerial de Modernización de la Gestión Pública (1999) y la Agenda de Probidad y Transparencia de la Presidencia (2007), además de Director Jurídico del Consejo para la Transparencia (2009-2013) y asesor y Jefe de Gabinete del Ministro de Vivienda y Urbanismo en diversos periodos (1996 a 1999, 2000, 2005 y 2006).

Actualmente se desempeña en este último ministerio como asesor.

REACCIÓN EN EL SENADO

Sin embargo, hoy en el Congreso, el senador Alejandro Guillier tomó contacto con sus pares de la bancada independiente, Lily Pérez y Antonio Horvath, para comentar las posibilidades de Rajevic. El voto de los independientes es clave para el Ejecutivo para alcanzar los 22 votos necesarios para su aprobación.

Por esto, la bancada independiente se reunió en el Congreso para tomar una determinación conjunta sobre el abogado. De esta manera, según adelantaron a El Líbero, decidieron rechazar su nombramiento. Esto, debido a dos antecedentes, que a juicio de los senadores, son clave a la hora de votar por el futuro contralor que reemplazará a Ramiro Mendoza, quien dejó el cargo en abril pasado.

Hace algunos días se publicó una antigua demanda del CDE en contra de Rajevic. Data del año 2010 y buscaba cobrarle más de $30 millones correspondientes a una beca de doctorado. Hoy se encuentra prescrita, por lo tanto fue archivada. Sin embargo, los  independientes explican que el antecedente podría complicar sus opciones.

A este hecho, se suman las dudas que han surgido por el hecho de que Rajevic haya sido asesor de distintas reparticiones públicas en los últimos años, lo cual lo obligaría a inhabilitarse de conocer casos relacionados con dichas entidades. El abogado ha desarrollado diversas asesorías en los ministerios de Hacienda,Economía y Vivienda, además de la Dirección de Presupuestos, durante el período octubre-diciembre de 2014.

En el eventual escenario de que sea designado como contralor, deberá abstenerse de informar dictámenes y de aprobar (tomar razón) decretos y resoluciones de las entidades anteriores. Esto según el artículo 12 de la ley 19.880, que indica que las autoridades deben abstenerse de conocer e intervenir en caso de “tener relación con persona natural o jurídica interesada directamente en el asunto, o haberle prestado en los dos últimos años servicios profesionales de cualquier tipo y en cualquier circunstancia o lugar. La actuación de autoridades y los funcionarios de la Administración en los que concurran motivos de abstención no implicará, necesariamente, la invalidez de los actos en que hayan intervenido”.

Estos antecedentes encendieron las alarmas al interior del Congreso y se generó un fuerte debate en torno a la opción de Rajevic tanto en el oficialismo como en la oposición. El gobierno necesita 22 votos para su aprobación, sin embargo, al no contar con el voto de los independientes, el nombre de Rajevic podría verse entrampado en el Senado.

LILY PÉREZ

– Tras cinco meses desde que Ramiro Mendoza dejó la Contraloría, el gobierno propone a Enrique Rajevic. ¿Qué le parece su opción?

– Primero,  me parece pésima la demora que ha tenido el gobierno en nominar a un contralor general. En segundo lugar, me parece que el gobierno tuvo la posibilidad de haber escudriñado mejor a su candidato, en tercer lugar, acá no basta con que el gobierno le pida el parecer a algunos partidos políticos, a algunos senadores por su orientación política, sino que por la intachabilidad de los candidatos. El gobierno comete un nuevo error, al someter a escaño público a una persona que probablemente es un estupendo profesional, pero que con esto lo está sometiendo a un escrutinio que no le será favorable.

– Rajevic tuvo una demanda del CDE en su contra por el no pago de una beca. ¿Cuál es su postura frente a ese antecedente?

– El candidato del gobierno obtuvo una beca el año 2000 del ex Mideplan, actual Conicyt. Estas becas tienen una serie de requisitos, entre otros, que tienen el plazo de cinco años de devolver lo entregado a través del doctorado, y este señor recién lo entregó en 2011, absolutamente fuera de plazo. Como infringió el artículo 10, que establece que es gravísimo el no haber cumplido con la exigencia de la devolución a través de la tesis doctoral y del trabajo del sector público, el CDE decide demandarlo y después el CDE deja inactiva la demanda por prescripción, no por no pago, sino que porque prescribió el plazo de cobro, entonces la verdad, una persona con ese cuestionamiento no puede ser el candidato del gobierno a contralor general.

– ¿El gobierno les dio cuenta de esta información?

– No. Solamente el ministro del Interior llamó anoche  al senador Alejandro Guillier, como jefe de bancada de senadores independientes, para decirle que el gobierno había decidido enviar este nombre, nada más. No sé si le habrá tomado el parecer al senador Guillier, pero yo en lo personal, no tuve con quién en el gobierno manifestarle mis reparos. Además, un contralor general no puede estar inhibido de actuar en ninguna materia, menos relacionada con la administración de algunos ministerios. Y el candidato actual, fue asesor de al menos Economía y Vivienda.

– ¿Cómo será su voto? 

– Mi voto va a ser contrario. Si los otros senadores deciden respaldar esta propuesta allá ellos, pero yo me veo en la obligación de hacer un llamado de atención al resto de los senadores, de que estamos entregando la Contraloría por ocho años más a una persona con estas dificultades.

HORVATH Y GUILLER

En la misma línea que Pérez, Horvath afirma a “El Líbero” que “hemos propuesto buenos nombres, que no tienen este tipo de controversias o inhibiciones en su actuar. Según nostros, Rajevic no cumple los requisitos. Esos antecedentes juegan un rol importante. Yo tengo otros candidatos. Y es mejor que el gobierno piense en otro nombre, por el hecho de que entra al debate un candidato a contralor con demasiados amarres”.

Asimismo, Guiller, explica a “El Líbero” tras la reunión de bancada que “quien sea contralor debe ser una persona intachable, en segundo lugar, respeto la decisión de la Presidenta, pero ha surgido una controversia que debe despejarse, sobre si Enrique Rajevic cumplió o no con todos los requisitos de su beca y respondió a los compromisos que contrae una beca. Un contralor debe tener cumplimiento perfecto y preciso, ya que será el gran controlador y fiscalizador de todas las instituciones, por lo que debe estar en una plano impecable”.

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