El Gobierno de Evo Morales denunció que funcionarios de migración del aeropuerto de Iquique retuvieron por horas a dos periodistas que llegaron a nuestro país para informar sobre la situación de los nueve bolivianos detenidos el fin de semana en la frontera.
La ministra boliviana de Comunicación, Gisela López, dijo en una rueda de prensa en la ciudad de Santa Cruz que la reportera Sandra Mariscal y su camarógrafo Erick Condorena, trabajadores del canal estatal Bolivia TV, no pudieron ejercer su derecho a informar con libertad sobre ese caso.
«Nosotros, como Gobierno nacional, rechazamos rotundamente esta violación de derechos laborales, pero además, del ejercicio libre a las comunicaciones. Pensamos que Chile le tiene miedo a la verdad«, dijo López.
«Vamos a apelar a los organismos internacionales que velan por la libertad de prensa en el mundo para hacer una denuncia internacional y planteamos también que los gremios, los organismos que tienen que ver con la prensa en Bolivia y también fuera de Bolivia puedan hacerse parte de esta denuncia», agregó la ministra.
Según la denuncia, los periodistas llegaron este viernes a Iquique, donde les dijeron que si querían hacer cobertura periodística necesitaban visas de trabajo. En una conferencia de prensa junto a la ministra de Comunicación, el camarógrafo contó que lo retuvieron en una oficina del aeropuerto de Iquique, pese a que portaba su pasaporte de servicio y otros documentos.
Tras esto lo subieron en un avión comercial para regresar a Bolivia. A la periodista Sandra Mariscal sí le permitieron ingresar a Chile, pero a cambio de firmar un documento en el que se comprometía a no ejercer labores periodísticas, sino permanecer en estatus de «turista».
Condorena afirmó que ha realizado coberturas internacionales en varios países para Bolivia TV y que nunca tuvo los problemas que afrontó ante las autoridades chilenas. (Cooperativa)