Esta mañana el intendente Claudio Orrego aseguró que dentro del Plan de Descontaminación de la Región Metropolitana, que debería entrar en vigencia el próximo año, se está considerando la posibilidad de prohibir la comercialización de leña y el uso e instalación de calefactores y chimeneas en la capital. La propuesta, que ya había sido sugerida hace algunos meses por el Ministerio del Medio Ambiente, no cayó bien en la industria proveedora de este tipo de aparatos y combustibles y lo acusan de dar una señal «equivocada e inentendible» e incluso ilegal.
«No sé si el intendente Orrego tiene toda la información de la ciudadanía al respecto y hay que ver cuáles son los alcances de legalidad que pueda tener este tipo de prohibición. (…) Creemos que eso es un cambio brutal en las reglas del juego en muy corto tiempo, muchos usuarios compraron sus equipos hace poco como para que ahora se piense en prohibirlos, es una señal súper equivocada e inentendible», dijo a Emol el gerente comercial de Amesti, Pablo Rebolledo. En esa línea explica que como empresa le han explicado su punto de vista a la autoridad medioambiental, participando incluso de la consulta ciudadana hecha en torno al Plan de Descontaminación.
«Dimos nuestra opinión en la consulta ciudadana y esperamos sea considerada y si no veremos en qué otras instancias se pueden hacer valer nuestros derechos. Hay aristas constitucionales que hay que evaluar», alertó el representante de la compañía. Calefacción del sector oriente Según los datos del Ministerio del Medio Ambiente, actualmente hay 120 mil calefactores a leña en la Región Metropolitana. De ellos, los 15 equipos de fiscalización de la Seremi de Salud cursaron 70 sumarios sanitarios a domicilios durante el otoño e invierno de 2014, el año pasado curó otras 99 casas en el mismo período y en lo que va del año ya ha ejercido otras 21 sanciones por no cumplir con la normativa vigente.
Sin embargo, desde la industria aseguran que los capitalinos están informados y han desistido en la compra de aparatos que utilicen la leña como combustible y apuestan por el recambio a una tecnología más moderna. «La venta en Santiago es bien marginal, es muy discutible la información que dice el intendente Orrego, que son los calefactores de la zona oriente los que generan más contaminación, porque nosotros calefactores a leña para calefacción en la Región Metropolitana no vendemos», puntualizó el gerente comercial de Bosca, Cristián Cooper.
Asimismo según explicó Orrego, las comunas que más contaminan a través de este tipo de fuentes son las del sector oriente, sin embargo, las más afectadas finalmente son los sectores más empobrecidos de la región. «Yo le pediría al intendente, a título personal, que un día vaya y diga dónde están las estufas a leña prendidas de la zona oriente para que justifique el comentario de que efectivamente de que esa es la fuente de la contaminación», comentó Cooper. «Está cada día con menos venta para la Región Metropolitana por efectos de que la misma autoridad se ha preocupado de desprestigiar el sector, llevamos años con este desprestigio que en algunos años les va a pasar la cuenta. Mucha gente no tiene otros combustible para calefaccionarse, este no es un combustible de los ricos como se le ha dicho», resaltó por su parte Pablo Rebolledo. Económico y accesible Ambos representantes dicen estar de acuerdo con la fiscalización y restricciones en función del bienestar de la población, pero aseguran que las medidas deben apuntar a mayor educación y considerar la realidad del país a la hora de modificar la normativa. «Una chimenea normal emitirá de 25 hasta 60 gramos de material particulado, un calefactor certificado, como los que vendemos nosotros, emiten menos de 2,5 gramos hora y un calefactor a pellet, emite menos de 0,8 gramos hora. Lo más probable es que sea más conveniente que los calefactores más antiguos, que son de tecnología más ineficiente, los cambien por tecnologías modernas y eficientes que son los que se están vendiendo ahora», sugirió el gerente de Bosca.
Al respecto, el representante de Amesti agregó que «más del 60% de la energía que se usa al interior de las casas de los chilenos, promediando de Arica a Punta Arenas, viene de la leña» y criticó que aún no sea considerada por combustible. «No se ha hecho ningún esfuerzo con el combustible, ni siquiera es reconocido como combustible (la leña), siendo que es el único que realmente tenemos los chilenos y se usa en gran parte del país, con mucho arraigo y penetración al interior de las casas (…) En los estudios que el mismo Ministerio ha mandado hacer se ve claramente que mucha gente de los grupos C2, C3 y D usan la leña y mucha en forma gratuita porque no tiene otra cosa para calefaccionarse».
Fuente: Edición Original Emol
Fotografía: La Nación
