En un nuevo informe de Contraloría, el organismo fiscalizador inició un sumario administrativo contra la Subsecretaria de Educación, dependiente del Mineduc, por la ausencia de respaldo en los gastos por más de $2 mil billones que incurrió la cartera para realizar mejoras en los liceos bicentenario.
Los recursos se destinaron a cinco sostenedores de la región Metropolitana a través de convenios que buscaban financiar obras de infraestructura y en los cuales se podía invertir en construcción, reposición, reparación y ampliación de los establecimientos, además de la adquisición de equipamiento y mobiliario, la preparación y desarrollo de los diseños de arquitectura y especialidades para los denominados Liceos Bicentenario de Excelencia.
El monto transferido y ejecutado entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2013 ascendió a M$2.675.613.583, donde el organismo fiscalizador precisa que la responsabilidad de la cartera es «fomentar el desarrollo de la educación en todos los niveles y modalidades, propendiendo a asegurar la calidad y la equidad del sistema educativo».
Sin embargo, pese a los principios estipulados y a la solicitud de información de Contraloría, la entidad fiscalizada no entregó los antecedentes solicitados en julio de 2014, por lo que no se pudo comprobar que los recursos fueron utilizados para los fines previstos, con apego a las condiciones establecidas en los convenios de transferencia de recursos y desempeño, con las autorizaciones correspondientes y con una correcta valuación y registro.
La argumentación que hizo la subsecretaria para no entregar la información, donde de hecho solicitó más tiempo para recabar los antecedentes y el cual fue denegado, está «la reestructuración interna del proceso de Liceos Bicentenario y las dificultades que se ocasionaron en el traspaso de información a esta nueva administración, principalmente a que la entrega de la documentación se encontraba incompleta y no sistematizada».
Para Contraloría, «el hecho de que la entidad fiscalizada no tuviera la documentación completa y sistematizada de los proyectos relacionados -lo que fue acreditado por este Ente de Control-, impide corroborar que las transferencias hayan sido invertidas para los fines previstos, así como también validar que dichos desembolsos, por ejecución de obras, se condicen con los avances que presentan estas en terreno, entre otros aspectos».
Lo anterior, además, «infringe los principios de eficacia y eficiencia (…) que ordenan que las autoridades y funcionarios deben velar por la eficiente e idónea administración de los medios públicos y por el debido cumplimiento de la función pública».
Por ello, el organismo fiscalizador instruyó «un sumario administrativo con el objeto de esclarecer los hechos y en su caso, establecer las eventuales responsabilidades administrativas de los funcionarios de la Subsecretaría de Educación y de todos aquellos que resulten responsables, en relación a las irregularidades en la rendición de cuentas, pagos, y conflictos de intereses en la implementación del programa denominado ‘Liceos Bicentenario de Excelencia'», de dicha cartera. (Emol)