Una tenso almuerzo se vivió hoy en uno de los comedores del Congreso Nacional, específicamente en el que ocupan los diputados de la bancada socialista.
Allí, por más de dos horas, se reunieron los parlamentarios del partido junto a su presidente, Álvaro Elizalde. Algunos salieron del recinto con pasos apurados, por puertas anexas y sin conversar con la prensa, mientras que en paralelo un grupo acompañó al timonel del bloque a relatar a los periodistas lo conversado, situación que se centró en cómo se enfrentará la división interna que se generó a raíz de las inversiones del partido.
Consultado sobre si serán sancionados los miembros de la comisión patrimonio y si es que se les exigirá que pidan disculpas -como lo solicitó el diputado Fidel Espinoza a través de una carta enviada esta mañana- Elizalde reiteró que «pronto» serán anunciadas las medidas al respecto que apuntan a elevar la transparencia «conforme a los valores en los que nosotros creemos».
«Yo soy presidente de un partido democrático y en los partidos democráticos se anuncian las decisiones una vez que éstas son adoptadas por los organismos correspondientes. En su momento tenemos que citar al comité central, sí, porque tenemos que además discutir el tema parlamentario y presidencial», señaló el líder del PS.
En ese sentido, el jefe de bancada, diputado Daniel Melo, recalcó que se tomó la decisión de «respaldar cada una de las medidas que ha venido tomando la mesa directiva» en la materia. «Vamos a estar de manera leal y consecuente a cada una de las decisiones que se vayan tomando como partido (…). Cada una de las decisiones que ha tomado nuestra directiva se han tomado en el seno de nuestro partido y la bancada acoge esta posición», apuntó.
AUTOCRÍTICA
Tras participar de la misma reunión, el diputado Osvaldo Andrade respaldó la gestión que ha ejercido Elizalde al enfrentar esta crisis, asegurando que «confía» en él.
Sin embargo criticó las palabras que tuvieron los ex miembros de la comisión de patrimonio en la misiva conocida ayer asegurando que debieron ser más «autocríticos».
«Si hubiera tenido menos adjetivos y hubiera tenido una dosis de autocrítica respecto a algo que todos coincidimos que fue un erro hacer una inversión en SQM, creo que hubiera sido una muy buena carta», resaltó Andrade quien llamó «dar las explicaciones de rigor» para recuperar las confianzas. (Emol)