Demanda laboral por $200 millones contra nuera de Bachelet

Demanda laboral por $200 millones contra nuera de Bachelet

Compartir

Sergio Francisco Bustos Baquedano demandó por cerca de $200 millones a la empresa Exportadora y de Gestión Caval Limitada, de propiedad de Natalia Carolina Compagnon Soto, nuera de la Presidenta Michelle Bachelet, y de Mauricio Guillermo Valero Illanes, porque no le pagaron su sueldo por unos 14 meses como también previsiones de salud, AFP, cesantía, indemnización y feriado legal, ni un bono de 5.000 UF.

La demanda laboral se encuentra radicada en Primer Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago y de acuerdo al líbelo, Bustos, de 68 años y afincado en Chillán, fue contratado en mayo de 2013 por Caval Ltda. para trabajar en un megaproyecto inmobiliario y comercial de 44 hectáreas en la comuna de Machalí, Región de O’Higgins, el cual consistía en gestionar multimillonarios créditos bancarios para comprar los predios, ubicar y tasar terrenos y realizar estudios de mercado.

En entrevista a El Líbero, Bustos señala que “cuando me contrataron  en mayo de 2013 me empezaron a meter pega encima. Ud. comprenderá que para conseguirle un crédito de 265 mil UF ($6.500 millones) a una empresa que tenía un capital de $6 millones cuesta mucho. Incluso, me autorizaron que hiciera todo lo humanamente imposible para conseguir el crédito, y yo hice muchas cosas humanamente imposibles, y esas cosas no se las puedo decir porque si no me van a meter preso. Pero yo hice mi pega y no me pagaron. Ahora, ellos me pagaron los hoteles, las comidas, arriendos de autos y me daban plata para rendir. Valero dice que yo no trabajaba con él y resulta que me pedía informes, entre otras cosas”.

Explica que el trabajo que realizó consistía en entregar documentación, estar en terreno con tasadores de bancos y particulares, dirigirse a Machalí para hacer un estudio de mercado de todos los predios en venta, “hasta conseguir que la Sra. Natalia fuera al Banco de Chile a pedir la reunión. También la negociación con el síndico para pedir prórroga, las solicitudes de los  créditos con los bancos Santander, Itaú, BCI, Scotiabank y un banco alemán”.

Agregó que había conversaciones con bancos como Santander, el cual no resultó o el de Itaú, en donde lo negaron porque “era un asunto político”.

Bustos precisa que debieron haberle pagado por el trabajo realizado, añadiendo que “yo no tengo por qué estar escondiendo nada a nadie, pero si hago el trabajo que me encargan y me pagan me quedo tranquilo y callado, pero no me pagaron y los demandé. Lo único que hice fue demandarlos. Ellos me amenazaron mucho de que si yo hacía público cualquier cosa me iban a cagar. Yo no hice público nada. Un periodista no sé cómo llegó al tribunal, le pasó el dato y sacó la información del tribunal y me llamó. Yo no puedo hablar nada más que lo que está en el tribunal”.

Explica que ha presentado en tribunales diversos documentos como correos electrónicos y otros para demostrar que había dependencia laboral. “Presenté 3-4 hojas de WhatsApp con el jefe mío en Caval, que era Victorino Arrepol Garrido. Teníamos muchos cruces de WhatsApp y los presenté como prueba y ellos le pidieron al juez que oficiara al Ministerio Público para que abriera un caso en mi contra porque estaba exponiendo documentos privados, pero el juez aceptó la prueba. Después de  20 documentos presentados paró porque era muy tarde y dijo que el juicio continuaría el 9 de enero. El 6 de enero aparece una resolución del juzgado laboral, que informaba que el juez que veía el caso terminó su trabajo el 31 de diciembre, todo lo obrado en el juicio quedaba nulo y volvía a fojas cero. Pero resulta que nos dan nueva audiencia para el 25 de enero, pero les dan la posibilidad de contestar la demanda, que estaba  contestada ya en diciembre”, argumentó.

“Antes de recibir el  crédito con el Chile les dije que la venta la hiciéramos con un abogado que había trabajado con nosotros. Pero en la reunión de la Sra. Natalia con el banco,  le dijeron que la operación sería compartimentada, es decir, que se acababan los gerentes del banco y los abogados, y que el crédito lo verían solo ellos. Nos dejaron a un lado y el crédito salió. Si se fija en la venta, aparece el Banco de Chile hipotecando el crédito pero no aparece en la venta. No sé cómo fue la otorgación del crédito. Hoy escuché al presidente de la DC diciendo que era normal que una empresa particular hiciera un negocio con un banco de ese tipo si era confiable la persona y había respondido. Y el periodista le decía, oiga para cualquier crédito le piden de todo”, asevera.

Bustos señala que la nuera de la mandataria se reunió con altos ejecutivos del banco para conseguir el crédito, pero aclara que en el encuentro también intervino más gente vinculada a Natalia Compagnon, pero rechaza afirmar si en estos estaba Sebastián Dávalos. “Hoy no lo puedo decir (…) Sí, tengo muchas pruebas”, menciona.

Además, sostiene que es imposible que una empresa con menos de dos años de vida, $6 millones de capital, sin bienes para responder, sin flujo de caja para pagar intereses le entreguen un crédito por $6.500 millones.

“No pueden darle un crédito. No es delito, es una infracción grave. No pueden darle un crédito tan alto a una empresa de esas características, se pagaba en una cuota a los 180 días, prorrogables una sola vez, y eso se cumplió el 15 de enero y ese día no se pagó el crédito.  Hay cosas raras. Yo contraté a los abogados para hacer todos los trabajos, que tampoco les pagaron y que evalúan acciones civiles en contra de Caval”, asegura. (El Mostrador)

 

Dejar una respuesta