Lejos de terminar, el caso Caval vive un nuevo capítulo con la demanda que prepara la empresa Silca, firma que compró los terrenos en Machalí a la sociedad de Mauricio Valero y Natalia Compagnon, esposa de Sebastián Dávalos.
Según publica La Tercera, la acción judicial se basa en la promesa de cambio de suelo que experimentarían los terrenos, modificación que convenció a Hugo Silva, propietario de Silca, de comprar las hectáreas en Machalí.
Sin embargo, luego de destaparse el escándalo que terminó con la renuncia de Dávalos a la Dirección Sociocultural de La Moneda y una profunda crisis política dentro del Gobierno, el cambio de suelo se complicó por lo que Silva decidió preparar la ofensiva legal.
La demanda “persigue el resarcimiento de los perjuicios causados a Silca por el actuar doloso de Caval en la compraventa de los predios efectuados el 5 de marzo de 2015”, informó una fuente cercana a la empresa a La Tercera.
Otro antecedente para formular la demanda es que Caval habría informado que en el negocio participarían empresarios mexicanos vinculados a Carlos Slim para crear un proyecto inmobiliario, situación que hasta hoy no hay confirmación.
Por último, se apunta a que Caval aceleró la venta de terrenos para adelantarse a la publicación del reportaje de Qué Pasa que terminó destapando la polémica.
INCAUTAN COMPUTADORES DE MUNICIPALIDAD DE MACHALÍ
El fiscal de la región de O’Higgins, Luis Toledo, que lleva la investigación del caso Caval, ordenó la incautación de cuatro de los computadores de la municipalidad de Machalí.
El procedimiento fue realizado por el OS9 de Carabineros, finalizó con cuatro computadores incautados.
El alcalde de Machalí, José Miguel Urrutia, aseguró que los equipos eran utilizados por el ex director de Obras de la comuna Jorge Silva, y agregó que se está citando a declarar a otros funcionarios de la municipalidad, según T13.
“Esta diligencia fue sorpresiva pero siempre hemos estado disponibles para colaborar en la investigación”, dijo Urrutia aCNN.