Lo dijo Evo Morales antes de las elecciones y elVicepresidente Alvaro García Linera lo reiteró durante los comicios regionales en Bolivia: que si ganaba la oposición “no podemos trabajar con ellos”. Las declaraciones del Ejecutivo boliviano daban cuenta del temor del gobierno ante la arremetida opositora, en las elecciones en las que los bolivianos votaron para elegir a los nueve gobernadores del país y autoridades en 339 municipios.
En los comicios no sólo estaba en juego el liderazgo de Evo Morales -que fue re-reelecto en octubre con un 61%-, sino que también la competencia del oficialista Movimiento Al Socialismo(MAS), que ha perdido fuerza en los últimos años.
De acuerdo con los primeros sondeos a boca de urna, el MAS sufría una dolorosa derrota tanto en la gobernación como en la alcaldía de La Paz, uno de los nueve departamentos con más adeptos del Presidente. El alcalde paceño, Luis Revilla, lograba ser reelecto con un 60%, mientras que el masista Guillermo Mendoza tenía un 35%. A su vez, en la gobernación paceña, la candidata de Evo, Felipa Huanca, sufría una estrepitosa derrota, mientras que su rival de oposición, Félix Patzi, ganaba con un 51%. Tanto Patzi como Revilla forman parte de la nueva agrupación política Soberanía y Libertad (Sol.bo).
En el caso de La Paz, aunque dominada por la oposición, se trata de un fuerte traspié para Evo Morales, ya que además Felipa Huanca, encargada del Fondo Indígena, está acusada de enriquecimiento ilícito. “¿Cómo podemos dudar de nuestra hermana Felipa?”, dijo el Presidente durante la campaña.
Pero la derrota más dolorosa tenía lugar en la alcaldía El Alto, donde Soledad Chapetón, de la derechista Unidad Nacional (UN), lograba un 55% según Ipsos. Desde 2002 en adelante, Evo Morales y el MAS habían ganado todas las elecciones en esta ciudad aledaña a La Paz. El Alto, junto con Cochabamba, siempre ha sido el mayor bastión del MAS.
También la oposición recuperaba terreno en Santa Cruz, con la elección a gobernador de Rubén Costas. En las presidenciales de octubre, Morales se impuso por primera vez en este departamento y en la totalidad del país, con la excepción de Beni.
Ahora, el MAS ganaba en cuatro de los nueve departamentos (Oruro, Potosí, Cochabamba y Pando), mientras que la oposición conquistaba las gobernaciones de Santa Cruz, Tarija y La Paz. Tanto en Beni como en Chuquisaca habría segunda vuelta. (La Tercera)