Tras días de haber detonado el escándalo del expresidente de Argentina, Alberto Fernández, por las denuncias de violencia física que le imputó la exprimera dama, Fabiola Yáñez, el Gobierno condenó categóricamente la trama.
En la vocería de Gobierno de los días lunes, la ministra de la Secretaría General de Gobierno, Camila Vallejo, indicó que «esto es un hecho que ha escandalizado al mundo y también a nosotros. Esto es muy grave».
«Lo que hemos conocido todos a través de los medios de comunicación es una situación de violencia de género extrema que no solamente condenamos, sino que da cuenta de que la violencia de género no discrimina a espacios de poder y militancia», sostuvo.
Y añadió: «No podríamos sino condenarlo y hacer un llamado a que con mayor razón reforcemos las políticas anti-discriminación y las políticas de promoción de los derechos de niñas, adolescentes y de mujeres, porque son parte de nuestra sociedad y porque tienen derechos, en todo nivel y en todos momentos».
«Por eso es tan importante en estas cosas, obviamente no solo el pronunciarnos y condenar, sino que como un llamado a actuar frente a legislaciones que puedan ser débiles, ver aquellos vacíos que se tienen en otros países para mejorar los estándares de protección. Insisto, porque la violencia de género lamentablemente no discrimina contexto, lugar, espacio de poder, sector político, absolutamente nada», aseveró. (Emol)