Los principales banqueros centrales del mundo advirtieron que la era de las tasas de interés bajas y la inflación moderada ha llegado a su fin tras el “choque geopolítico masivo” de la invasión a Ucrania y de la pandemia de Covid-19.
Hablando en la conferencia anual del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, su presidenta, Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, y Andrew Bailey, gobernador del Banco de Inglaterra, pidieron una acción rápida para frenar la inflación.
Dijeron que no aumentar las tasas de interés lo suficientemente rápido podría mantener alta la inflación y, en última instancia, requerirá una acción más drástica por parte de los bancos centrales para que el crecimiento de los precios vuelva a niveles más moderados.
“Es muy probable que el proceso implique algo de dolor, pero el peor dolor sería no abordar esta alta inflación y permitir que se vuelva persistente”, dijo Powell.
Hablando en Sintra, Portugal, los jefes de los bancos centrales dijeron que la pandemia y la guerra de Ucrania están revirtiendo muchos de los factores que habían provocado más de una década de inflación ultrabaja entre la mayoría de las economías desarrolladas.
Advirtieron que la fragmentación de la economía global en bloques competitivos podría fracturar las cadenas de suministro, reducir la productividad, aumentar los costos y frenar el crecimiento. (FT DF)