La excandidata a la Gobernación de la Región Metropolitana, Karina Oliva, se refirió a los cuestionamientos que se han hecho en su contra tras las denuncias sobre irregularidades en sus rendiciones de gastos de campaña.
En entrevista con Meganoticias, la primera que da tras las acusaciones en su contra, la también excandidata al Senado, ante los cuestionamientos sobre las remuneraciones recibidas por su equipo de campaña por las que se rindieron boletas por $137 millones, indicó que “no hubo sueldos millonarios y no hubo objeción a las prestaciones de servicio de aquellas personas, tanto en primera vuelta, como en segunda vuelta”.
Asimismo, sobre los pagos a su equipo dijo que “comparto y creo que uno tiene que ser mucho más riguroso con este tipo de acciones, con este tipo de pagos que debiesen no ser altos porque la ciudadanía te exige mayor austeridad, sobre todo, con los momentos críticos que vive el país”, aseguró Oliva.
Consultada por un “desayuno feminista”, realizado el 13 de junio de 2021 y por el cual se habría rendido cuentas por $50 millones, la otrora carta fuerte del Frente Amplio se excusó, asegurando que en su momento no supo enfrentar los cuestionamientos por dicha actividad.
“Uno de mis mayores errores fue no saber explicar esto (…) puedo justificarlo en mil cosas, pero voy a ser tajante: no existió ningún desayuno por $50 millones. No hay ninguna boleta o factura que esté declarada por ese monto o emitida hacia mí por algún proveedor y tampoco hay una solicitud de reembolso por $50 millones”, aseguró Oliva.
“Esta factura nunca se emitió, porque eso fue una cotización”, cerró sobre el cuestionado desayuno.
También, de la declaración de Oliva surgieron cuestionamientos por incluir una factura que emitió la productora audiovisual Miscelánea por prestaciones de servicios a la campaña de René Naranjo en su carrera para ser constituyente.
“Nosotros declaramos que esa factura no correspondía a nuestra campaña, la declaramos al Servel y fue sacada de nuestra contabilidad”, aseguró Oliva, quien aseveró que “hay un error del emisor de la factura” y que es un error que -afirma- no dependía de su campaña.
Sobre la prestación de servicios de la empresa Alerce Talleres Gráficos S.A., perteneciente a Milton Lee, extesorero del Partido Socialista imputado por el caso SQM hace siete años, Oliva afirmó que “a mí me molesta mucho, me da mucha rabia de que mi jefa de campaña hubiese aprobado una prestación de servicios con esta empresa y que, tomar esa decisión política de esta prestación de servicios sin decírselo a la candidata, me parece que es un abuso de confianza y tristemente me entero por la prensa de que Milton Lee estaba asociado a una factura de mi campaña y me decepciona más cuando se me trata de acusar a mí de una decisión que yo no tomé, que tomó Carolina García”.
Sobre las “donaciones” a las candidaturas de -entre otros- Ana María Gazmuri, Emilia Schneider y Tomás Hirsch, se defendió asegurando que “lo que hicimos fue tener publicidad compartida, en la que asumo el costo yo. Es decir, donde aparece Karina Oliva y aparecía otro candidato, yo declaré al ‘señor’ Servel como establece la ley, de que uno tiene que declarar todo. Yo no dejé nada sin declarar, justificado, como corresponde”.
La excandidata a gobernadora regional y al Senado destinó $ 68 millones de su candidatura para solventar papelería, palomas, balconeras y volantes de otros aspirantes a cargos de elección popular del Partido Comunes y ex Humanistas. El Servicio Electoral (Servel) objetó la devolución de fondos señalando que es irregular, recordándole que un postulante no puede financiar otras campañas y, además, pedir al Fisco el reembolso de dichos gastos que son «personales e intransferibles».
Tras ser expulsada del Partido Comunes luego de las acusaciones sobre irregularidades en la rendición de gastos de su campaña, Oliva le envió al Tribunal Supremo de Comunes una carta en la que acusa a la diputada Camila Rojas de haberle solicitado incluir en la rendición de las elecciones a la segunda vuelta del Gobierno Regional “facturas que no correspondan a mi campaña, sino que a la de un candidato a las primarias del 18 de julio del año 2021, a lo que me negué tajantemente″.
Al ser consultada sobre esta aseveración, y si se refería a la campaña de primarias de Gabriel Boric, Oliva afirmó que “en segunda vuelta mi jefa de campaña era Carolina García que era secretaria general del partido, ella llevaba la relación con todos los comandos, me refiero con el comando presidencial del entonces candidato del Frente Amplio, y no las llevaba yo, que estaba desplegada 24/7. Quien tiene que responder sobre esos dichos, porque era responsable del diálogo con el comando, con el jefe de campaña del candidato presidencial que es el actual ministro Giorgio Jackson, es Carolina García”.
Sobre si se negó a incorporar la factura de la campaña de primarias, aseguró que ante “cualquier situación que no vaya conforme a la ley, siempre me voy a negar y no solo yo. Sé que lo haría cualquier candidato del Frente Amplio”.
Del rol de Giorgio Jackson entre el comando de Oliva y el de Gabriel Boric, aseguró que “todos los jefes de campaña se coordinan para agenda, despliegue (…) yo no tuve trabajo, yo no tuve contacto con el ministro, no he hablado en meses con él. Ni siquiera en los últimos meses ni durante la campaña. Sí es cierto que Carolina García cuando coordinaba cosas con el comando del Presidente, las coordinaba con Jackson y eso no tiene nada de ilegítimo”. A ser consultada sobre si tenía claridad del rol de Giorgio Jackson en cuanto a esa coordinación, dijo que “yo no tengo claridad porque no estaba ahí. Quien tiene que responder eso es Carolina García”.
Cuando se conocieron las acusaciones en contra de Karina Oliva, el entonces candidato Gabriel Boric se distanció de ella. En ese contexto, afirmó que “yo puedo entender que el candidato presidencial en ese momento tomara distancia frente a las acusaciones. Sin embargo, a mí me hubiese gustado no enterarme por la prensa, me hubiese gustado que me preguntaran, un WhatsApp, una llamada. ‘¿Es cierto, puedes demostrar que es falso lo que dicen?’”, porque yo creo algo profundamente en términos de institucionalidad democrática: la presunción de inocencia es un derecho”.
“Nunca más” volvió a hablar con el Presidente Gabriel Boric, “hasta el día de hoy”, declaró. (La Tercera)