En un giro de 180 grados con respecto al kirchnerismo, el gobierno de centroderecha de Mauricio Macri busca aprovechar la visita de Barack Obama para recomponer el vínculo de Argentina con Estados Unidos, luego de una larga gestión de centroizquierda que estrechó lazos con China y Venezuela, según destaca la prensa transandina.
«Nosotros estamos muy contentos de poder darle un arranque veloz a una relación bilateral que es muy antigua y que ha estado muy deteriorada en el último tiempo», afirmó el jefe de Gabinete de Argentina, Marcos Peña, quien agregó que la visita muestra el apoyo al proceso de cambio en el país. «Aquí en Washington había un deseo de saludar ese cambio con (…) un lindo gesto de apoyo», dijo a Reuters el ex embajador estadounidense en Argentina Earl Anthony Wayne.
La cadena argentina Todo Noticias recordó que la última vez que un presidente estadounidense había estado en Argentina fue en 2005, cuando George W. Bushparticipó de la Cumbre de las Américas en Mar del Plata. En ese momento recibió fuertes críticas de Néstor Kirchner y de Hugo Chávez por el proyecto de libre comercio para la región (ALCA) que impulsaba el norteamericano. El malestar con Estados Unidos se mantuvo en los dos períodos de Cristina Kirchner.
Obama mantuvo por años una tensa relación con la ex presidenta Cristina Fernández, una aliada de Hugo Chávez que profundizó las relaciones comerciales con China. Más de una vez Fernández atacó verbalmente a funcionarios estadounidenses y Obama la desairó en reuniones regionales.
El viaje de Obama llega en un momento de declive de las administraciones de centroizquierda que han gobernado varios países sudamericanos en la última década, y su apoyo a la nueva gestión de Argentina es considerado por algunos como parte de una alianza estratégica en la región, sostiene Reuters. Es lo que piensa también el analista argentino Rosendo Fraga, quien señala en una columna publicada por el diario Los Andes que el viaje de Obama busca «dar una clara señal de respaldo a la gestión de Macri, en un intento de reforzar una dirección que resulta coincidente con los intereses de Estados Unidos».
En declaraciones al diario porteño Clarín, Peña planteó que la cumbre Obama-Macri «ayudará a acelerar los procesos de confianza del mundo con Argentina, que es uno de los objetivos para esta etapa de transición». Pero la apuesta de los macristas, apunta el periódico, es más amplia. Buscan convertir a Macri en referente de la región. En ese sentido, Clarín destaca que ya aparecieron banderas con su nombre en las protestas de Brasil y Venezuela. Y las dos fotos que se vienen con Obama, en Buenos Aires y más tarde en Washington, podrían ser «otro empujón para potenciar» su imagen.
COMPROMISO DE OBAMA
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se comprometió este miércoles trabajar con su par argentino, Mauricio Macri, en lo que calificó como una «histórica transición» que está viviendo el país suramericano, al expresar su confianza en la «nueva dirección» que ha tomado esta nación.
En una conferencia de prensa conjunta en la Casa Rosada, Obama dijo entre risas que Macri, quien asumió la Presidencia en diciembre pasado, es un hombre «con prisa», y alabó la rapidez con que se ha movido para poner en marcha las reformas económicas que prometió.
«Estados Unidos está preparado para trabajar con Argentina en esta histórica transición«, afirmó Obama.
Asimismo, destacó que el nuevo rol que ha asumido Argentina en las relaciones con Estados Unidostras las tensiones vividas en la etapa de la predecesora de Macri, Cristina Fernández, puede servir de ejemplo para mejorar los lazos con toda Latinoamérica.
Finalmente, el presidente estadounidense que llegó a Argentina procedente de Cuba con toda su familia,calificó su conversación con Macri de «excelente» y confesó que «por primera vez» ha probado el mate.
(La Tercera-La Nación EFE)