Los sucesos que ocurrieron después de que se filtrara una grabación donde aparece la voz del conocido abogado Luis Hermosilla acompañado por un cliente y una colega, será la justicia quien determine el grado de compromiso con la ilegalidad.
Todo lo anterior me lleva a una reflexión sobre el grado de corrupción en el país.
Chile se ha llenado de traidores y mentirosos. Acompaña la crisis política, económica y social que vivimos. Sin duda, es un mal prospecto para el futuro de nuestros hijos y nietos.
Es el poco apego a la ética y a la moral. Sin embargo, como dicen los ingleses “We shall previal”.
En estos momentos oscuros de la República, confío, que superaremos este dramático momento.
El 17 de diciembre se acerca un importante concurso electoral. Este plebiscito determinará, si se aprueba o se rechaza el nuevo texto constitucional, el cual sentará las bases para el futuro del país. Si se rechaza el largo capítulo instalado en el país, desde hace cuatro años, no se completará lo que los chilenos necesitamos.
La crisis que vivimos continuará y es un deber de las autoridades hacerse cargo de esta situación.
Ha comenzado a resaltar la crisis económica, la que se está convirtiendo en una moderación de la inflación. La desaceleración de la economía ha contribuido a una menor inflación, marcada también, por el aumento del desempleo.
El verdadero desafío para las autoridades es conducir un proceso que genere certidumbre, confianza y de esa manera incrementar la inversión para un crecimiento sostenido. De esa manera podremos observar una caída sistemática del desempleo. (El Líbero)
Alejandro Alarcón