Sabíamos que el 18 de octubre iba a ser un hito importante para reflexionar respecto del presente y el futuro de Chile. Sin embargo, inesperadamente marcó también el desarrollo de una crisis política e institucional de gran magnitud. Ello, luego del escándalo del denominado “caso Audio”, la aprobación de sendas acusaciones constitucionales en contra de dos ministros de la Corte Suprema, y de la renuncia —bajo gravísimas circunstancias— del subsecretario del Interior, encargado de la seguridad pública y de ambas policías.
No es novedad para nadie que esto ocurre en un contexto complejo para Chile, con enormes dificultades para retomar un crecimiento que logre responder a las demandas sociales crecientes en el tiempo, con las finanzas públicas bajo estrés, un sistema político fragmentado, un ambiente polarizado y una crisis de seguridad inédita para nuestros ciudadanos.
Debemos ser capaces de reaccionar con decisión, ponernos de acuerdo y avanzar en algunos ámbitos que parecen evidentes, sin más demoras, porque es hora de poner a Chile primero.
Los momentos difíciles siempre abren un camino de oportunidades. Concretar una reforma política para resolver la fragmentación en el Congreso, reforzar la independencia y probidad de nuestro Poder Judicial y dotarnos de un sistema de seguridad e inteligencia como el que tienen democracias liberales en todo el mundo desarrollado, son tareas que están absolutamente dentro de nuestras posibilidades, tanto económicas como institucionales.
Hoy, además de posibles, constituyen tareas urgentes, por cuanto son indispensables para la certeza y estabilidad jurídicas que el país requiere para volver a crecer. Para quienes representamos al sector productivo de Chile y aportamos con ideas, talento, y trabajamos por crear más y mejores empleos, una mejor calidad de vida para las personas y más oportunidades para las nuevas generaciones, nuestra preocupación está en que seamos capaces de responder a la ciudadanía y a quienes nos miran de cerca en otras latitudes.
Es por esta razón que, como gremios de Chile, queremos hacer un llamado a todos quienes tenemos responsabilidades de liderazgo a rechazar la parálisis y enfocarnos en lo que realmente importa, que son las personas.
Estamos convencidos de que nuestra trayectoria democrática como país no ha sido en vano y que debemos ser capaces de abordar esta crisis con altura de miras, respondiendo al desafío que nos llama y no siendo tolerantes con más mediocridad, corrupción ni estancamiento. (El Mercurio)
Ricardo Mewes
Presidente CPC
Presidente CPC
Susana Jiménez
Vicepresidenta CPC
Antonio Walker
Presidente SNA
José Pakomio
Presidente CNC
Jorge Riesco
Presidente Sonami
Rosario Navarro
Presidenta Sofofa
Alfredo Echavarría
Presidente CCHC
José Manuel Mena
Presidente Abif
Jorge Welch
Presidente Asech
Juan Pablo Swett
Presidente Multigremial Nacional
Rafael Cumsille
Presidente Confedechtur
Héctor Sandoval
Presidente Conapyme
Verónica Contreras
Presidenta Confentetuch
GREMIOS POR CHILE