Cuando el 5 de enero Carlos Alberto Délano declaró ante el fiscal Carlos Gajardo en el marco del caso Penta, tuvo que referirse a una serie de facturas emitidas por el centro de pensamiento Libertad y Desarrollo (LyD), las que fueron halladas por la Fiscalía en la contabilidad de Empresas Penta S.A.
“Respecto de Libertad y Desarrollo señalo que todos los meses efectuamos un aporte a dicho centro de estudios, ignoro el monto. Mensualmente nos envían copias de las publicaciones que hacen y nos extienden una factura”, declaró Délano al respecto.
Esa información fue confirmada por su socio, Carlos Eugenio Lavín, quien el 6 de enero también se refirió al asunto. “Efectivamente somos aportantes a la Fundación L & D desde siempre, me parece que de manera mensual. El concepto de la glosa que indica ‘informes y servicios de asesoría e información’, es correcto, se refiere a que ellos permanentemente nos envían informes económicos, legales, sobre proyectos de ley, en general sobre el acontecer económico y legislativo. No son informes específicos para Penta, sino informes que hacen para sus suscriptores en general”, señaló Carlos Lavín ante el fiscal Gajardo.
Al menos las versiones de los controladores del holding son coincidentes con lo que plantean desde el centro de estudios, donde reconocen que Penta “ha sido un colaborador permanente”. Según ellos, no se configuraría la figura de la factura falsa –la que se emite sin prestar ningún tipo de trabajo a quien paga por ese documento-, ya que ellos envían periódicamente a las empresas de Délano y Lavín una serie de insumos que elaboran sus investigadores.
“Tenemos distintos productos: revista, informes económicos, talleres de coyuntura y también editamos libros, además de un montón de temas y productos que nuestros suscriptores compran en una especie de pack. No hacemos charlas ad hoc ni estudiosad hoc. Estos productos tienen un precio determinado”, indican en LyD, sin dar a conocer cuál es el pack al que están suscritos Délano y Lavín.
La información contenida en la carpeta de la Fiscalía da cuenta de la información contable de Empresas Penta desde el 2010 al 2012, donde cada mes se registra un aporte no menor a los $2 millones para Libertad y Desarrollo. En total, en esos tres años la cifra donada por el grupo llegó a $82.084.878.
En LyD –think tank ligado desde siempre a la derecha neoliberal -, aseguran que más de 650 personas y empresas les envían remesas de dinero para aportar a su labor. Y aunque esos colaboradores son secretos “incluso para los investigadores, para así asegurar la independencia”, en los últimos años algunos han salido a la luz: además de Penta, el 2014 se supo que la British American Tobacco Chile (ex Chile Tabacos) se contó entre las empresas que le donaron recursos.
Según información revelada por Ciper, la principal tabacalera del país –firma británica que controla las marcas Lucky Strike, Dunhill, Belmont, Hilton, Kent y Viceroy, entre otras–, donó más de $5 millones al think tank de derecha, en medio de la tramitación en el Congreso de la ley impulsada por el entonces ministro de Salud, Jaime Mañalich, que restringía el uso del tabaco en el país.
El rol jugado por LyD en el Congreso no es menor. Según afirman en sus oficinas, ellos buscan “influir a través de los parlamentarios”. Por ello, asesoran gratuitamente a diputados y senadores de la UDI, RN y Evópoli. “Las asesorías parlamentarias no se pagan, nuestra única fuente de ingreso son nuestros suscriptores”, confirman en el centro de estudios.
Además, Libertad y Desarrollo es el único think tank que tiene oficinas en las dependencias del Congreso en Valparaíso. Según ellos, esa oficina se inauguró en 1991, cuando recién se restauraba el sistema democrático en el país. Afirman que en esa época eran varios los centros a quienes se les facilitaron oficinas, pero que ellos son los únicos que permanecen hasta hoy.
Actualmente, el Comité Ejecutivo del centro de pensamiento es presidido por uno de sus fundadores, Luis Larraín Arroyo –último ministro de Odeplan de la dictadura–, quien en 1990 lo creó juntó al ex ministro Cristian Larroulet y el ex mandamás de Hacienda, Hernán Büchi. En la subdirección está la ex directora de Presupuestos del gobierno de Sebastián Piñera, Rosanna Costa. Mientras que entre sus consejeros aparecen connotados personeros vinculados a la derecha, como el ex ministro Carlos Cáceres y Hernán Felipe Errázuriz, además de insignes rostros del establishment, como Patricia Matte y el actual director de empresas Penta, Alfredo Moreno. (El Mostrador)