Mario Fernández milita desde que tenía 18 años en la Democracia Cristiana. Cercano al matrimonio entre Gutenberg Martínez y Soledad Alvear. No solo está en contra del aborto, como la ex senadora. Fernández como prueba de ser un católico consecuente, está contra el divorcio. «Estoy contra el divorcio, porque la Iglesia está contra el divorcio. No tengo idea de las razones teológicas, yo no soy teólogo. Creo en todo lo que dice el cardenal. Él es mi autoridad religiosa», dijo mientras fue ministro de la Segpres en el Gobierno de Ricardo Lagos.
Mario Fernández hasta ahora no ha tenido problemas en demostrar sus convicciones. En 2008, fue el representante de la entonces Concertación, pero votó por impugnar el fallo judicial que autorizaba la distribución de la «píldora del día después». Frente a sus alumnos en la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile, reconoció que «yo estuve 20 años sin poder hablar libremente. Por eso me cansé y decidí renunciar al TC, ahora digo lo que quiero”, según aparece en su perfil de Wikibello hecho por los estudiantes.
Ahora es probable que desde su rol como la segunda autoridad de Gobierno y jefe de gabinete entre los ministros de La Moneda, no pueda decir lo que quiera. Mario Fernández, además del cardenal, en temas valóricos responde al Opus Dei, la prelatura registrada en el ala más conservadora de la Iglesia Católica. Y que tiene entre sus inscritos a empresarios y políticos, salvo el ahora ministro del Interior, ligados a la derecha política. El «Peta» Fernández es supernumerario, lo que entre otras cosas significa que puede practicar la religión y estar casado.
También pertenecen al Opus Dei los empresarios Eduardo Fernández León, ligado a Entel; Mauricio Larraín Garcés, ex presidente del Banco Santander; Luis Enrique Yarur, ligado al BCI. Entre los políticos, el ex presidente de RN Carlos Larraín, el ex ministro y presidenciable Joaquín Lavín, entre otros.
Está por verse cómo choca la agenda valórica, especialmente de género, con las convicciones valóricas del ahora ministro del Interior y cómo influyen en el desarrollo del trabajo legislativo. Por ejemplo, en el aborto para tres causales, la igualdad y equidad de género, la adopción homoparental o el matrimonio entre personas del mismo sexo.
De cualquier forma, Mario Fernández ha dicho que se identifica con la izquierda política y está a favor de un aspecto fundamental para el gobierno de Bachelet: «Yo estoy con la educación pública gratuita. Hay que presionar a los grupos de izquierda, yo voy a luchar para que la derecha no vuelva al poder porque esto no puede volver a pasar, no pueden hacer oídos sordos con medio mundo paralizado, hay que tomar medidas eficientes», dijo en 2011 en sus clases, a propósito de las movilizaciones durante el Gobierno de Piñera.
Fuente: Edición Original El Mostrador