Los suyos alegaron que no la dejaron intervenir en el debate. En el oficialismo explicaron que, apegados a las normas, esa fase de la asamblea era para proponer candidatos a la presidencia y que ella no lo hizo.
“No estaré en la mesa. Esperábamos un debate; para nosotros era más importante debatir primero políticamente los desafíos del PS, pero además abordar la crisis que tenemos”, explicó la diputada Maya Fernández Allende al retirarse. ¿Cómo ejercerá entonces la oposición a la mesa y qué rol tendrá? Según la líder de la lista que fue vencida por la de Elizalde, “nosotros, desde dentro, desde el Comité Central, vamos a trabajar con esa militancia e impulsar los desafíos del partido”. Desde ese organismo, dijo, “daremos todos nuestros debates políticos”.
Papel que está por verse, porque al menos la foto de este sábado no mostró una disidencia monolítica, aun cuando parte de ella se reunió en una asamblea paralela.
La decisión de no competir este sábado y marginarse del pleno no fue compartida por todos. “Fue una equivocación. Este es el órgano deliberativo del PS, acá se hace el debate. Si uno se retira, lo que hace es dejación de una responsabilidad; al ser elegido al Comité Central les otorgan un mandato”, cuestionó Osvaldo Andrade, uno de los disidentes que se quedó e intervino dos veces en el debate. También discrepó de que no se compitiera.
Marcelo Schilling permaneció unas horas más, pero al final se retiró, indignado porque -dijo- le habían “cortado” el tiempo de su intervención.
La Tercera/Agencias