Hoy, el ministro de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Andrés Couve, llegó hasta Antofagasta en el marco del despliegue de autoridades de gobierno por el plan “Paso a Paso”. Sin embargo, hizo un alto en su agenda para conversar de un tema ajeno a su cartera: el plebiscito constitucional de octubre.
La actualización que el Presidente Piñera realizó a la “cartilla” de la prescindencia de sus ministros los liberó de poder dar su opinión ante el referéndum del 25 de octubre. Un hecho político que divide a los partidos oficialistas.
En esta entrevista, Couve manifiesta estar a favor de la redacción de una nueva Constitución, dice estar en reflexión sobre el órgano que debe redactar la Carta Magna y se suma a la serie de definiciones políticas e ideólogicas que se ha dado en los últimos días por parte de miembros del gabinete: “Soy muy liberal en lo valórico y creo en un Estado moderno”.
¿Tiene una postura para el plebiscito del 25 de octubre?
Voy a votar apruebo. Me gustaría que unos principios como la justicia y la sustentatibilidad fueran algunos de los ejes del debate de una nueva Constitución.
¿Y cómo cree que se deben plasmar esos principios en la elaboración de una nueva Carta Magna?
Lo que se ha generado después de un momento social complejo, donde el acuerdo que habilitó el plebiscito permitió descomprimir ese momento, se ve como una posibilidad para abrir un debate que actualice una mirada de futuro. Una posibilidad para que, más allá de las opciones de Apruebo o Rechazo, todos nosotros, chilenos y chilenas, podamos discutir sobre el futuro y pensemos dónde queremos estar en veinte o treinta años más. Y por eso, para incorporar los temas que nos preocupan a los chilenos y chilenas, necesitamos propiciar y cuidar esos espacios que hoy son muy necesarios.
¿Qué cree que ocurriría si no se cuidan esos espacios de discusión, como lo sería una convención constitucional?
Correríamos un riesgo en que esta oportunidad, este momento para encontrarnos, termine por convertirse en una línea de división entre distintos bandos, que no es lo que se busca cuando uno comienza una discusión constitucional.
¿Siempre ha estado a favor de la elaboración de una nueva Constitución o ha ido cambiando su postura?
He estado porque incorporemos una visión de futuro donde el conocimiento es central. Siempre he estado por el Apruebo. Creo que es una instancia fundamental para el diálogo de todos y todas y legitima un proceso que exige mucha responsabilidad, porque afecta la forma como se van a organizar futuras generaciones. Entonces, siempre he estado por el Apruebo y también por promover una alta participación en un clima de diálogo y de confianza.
¿Qué órgano constituyente le gusta? ¿La convención constitucional o la convención mixta constitucional?
No, eso lo voy a definir más adelante.
Algunos de los argumentos que dan dirigentes de Chile Vamos que están por el Rechazo, y ahora también ministros de gobierno, es que no están las condiciones para desarrollar un proceso constituyente, de que éste puede traer más incertidumbre que certezas, y que se desarrollará después de hechos de violencia. ¿Qué piensa al respecto?
Hoy lo que tenemos que hacer es escuchar. Tenemos que darnos cuenta de que lo importante es promover la participación y eso significa escuchar al otro, escuchar las opiniones. Debemos promover una convivencia que permita que esas opiniones sean escuchadas y en ese sentido creo que, al margen de nuestras preferencias, si estamos a favor o en contra, el rol que nos corresponde como ministros es promover la participación y una discusión informada sobre el proceso. Eso es lo que a mi me mueve.
El gobierno, el Congreso y el Servel han trabajado en las últimas semanas, de forma apurada, para tener un plebiscito seguro. Algunos creen que a pesar de un rebrote en los próximos días, éste se debe realizar igual. ¿Cree lo mismo?
Primero, creo que es importante entender que para el gobierno la realización del plebiscito del 25 de octubre es una obligación y obviamente que queremos que se realice de la manera más segura, participativa y transparente. Ahora, para eso hay que tomar todas las medidas, para darle garantía a las personas de que van a participar de forma segura en este plebiscito.
¿Pero cree que se debe postergar nuevamente si es que hay un incremento de los casos?
Es que no sabemos cómo va a seguir la pandemia en Chile. Se están haciendo todos los esfuerzos para que esta tendencia (a la baja) que estamos observando de varias semanas, se pueda mantener. Pero eso no está garantizado y hemos visto cómo en otros países ha habido rebrotes significativos. Del lado sanitario, debemos trabajar para evitar esos rebrotes y hacer todo lo posible para que el plebiscito se haga en la fecha acordada.
¿Qué le parece que se haya descartado la opción para que voten las personas que estén contagiadas al momento del plebiscito?
Obviamente estamos con poco tiempo y tenemos que estar enfocados en la salud de las personas. Estamos en una situación inédita, tenemos que proteger la salud de las personas, y protegernos nosotros para proteger a los otros. Por lo tanto, hay consideraciones sanitarias que fueron tomadas en cuenta para esta decisión. Por la proximidad del plebiscito, es difícil implementar un sistema para que voten los contagiados porque son bastante complejos.
Últimamente, varios se han definido políticamente. El alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, se definido como socialdemócrata, el ministro Cristián Monckeberg como socialcristiano. ¿Usted cómo se definiría políticamente?
Valoro enormemente mi independencia política y en términos de principios, yo soy una persona muy liberal en lo valórico y creo en un Estado moderno, eficiente pero que también juegue un rol muy activo y clave en temas como la promoción de la investigación científica.
De eso, se podría desprender que se siente más cerca a las ideas de Evópoli…
Valoro muchísimo mi independencia política, no pertenezco a ningún partido y en ese sentido estoy muy tranquilo porque la diversidad de visiones que el Presidente ha incorporado en el gabinete, permite abordar estos temas con la seriedad que merece cada sector.
El Presidente permitió que las autoridades de gobierno den su postura pero sin hacer campaña. ¿Por qué cree que es relevante que los ministros y ministras se manifiesten por el plebiscito?
Es relevante porque aquí no se puede instalar una lógica de bandos. Una Constitución determina el cómo se van a organizar las generaciones futuras y por lo tanto van a haber distintas visiones. Es bueno que existan y lo que tenemos que hacer es levantar la mirada, trabajar con mucha responsabilidad en un ejercicio que debe ser legítimo para que le sirva a las generaciones futuras. Por eso, independiente de las visiones, es responsabilidad de todos y en particular de nosotros como gobierno, promover esa participación amplia con todas las visiones.
Y en específico, relacionado con la Ciencia, ¿qué debería incluir la nueva Constitución?
En cualquier escenario, ya sea por reformas constitucionales o por una nueva Constitución se vienen cambios y conversaciones profundas sobre el futuro de Chile. Y desde el ministerio de Ciencia esperamos contribuir a ese debate. La comunidad científica también debe contribuir a esa discusión, de cómo el conocimiento y la investigación científica, el desarrollo tecnológico, pueden ser parte de la construcción del futuro de Chile. Un ejemplo: cualquier texto constitucional que pretenda normar el ordenamiento social y jurídico del tránsito de una nación joven como es Chile a un futuro distinto, necesariamente debe reconocer la relación básica entre ser humano y naturaleza. Eso es solo un ejemplo de cómo temas profundos pueden ser abordados desde el conocimiento científico.
La actual Constitución dice lo siguiente: “Corresponderá al Estado, asimismo, fomentar el desarrollo de la educación en todos sus niveles; estimular la investigación científica y tecnológica, la creación artística y la protección e incremento del patrimonio cultural de la Nación”. ¿Cree que es suficiente?
Diferentes constituciones del mundo incorporan la ciencia de formas distintas. Algunas promoviendo la ciencia y la tecnología, también promoviendo la libertad de investigación, haciendo que el Estado sea eficiente, que tenga altos estándares de servicio público, algunas las vinculan con preocupaciones económicas, sociales y medioambientales. Entonces, lo que tenemos que hacer ahora es que como ministerio de Ciencia promovamos la participación de todos los ciudadanos y ciudadanas pero particularmente de la comunidad científica, para que estos temas de futuro y la visión de la comunidad científica también tenga cabida en este debate. (La Tercera)