Este fue un año donde el transporte en Santiago enfrentó duros incidentes que hicieron que las calles de la capital colapsaran en más de una oportunidad. Incluso, la labor del ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo, se vio cuestionada tras las tres grandes fallas que tuvo la empresa estatal Metro. En entrevista con La Tercera , el secretario de Estado hace un balance de estas situaciones, de las inversiones en infraestructura y los nuevos anuncios presidenciales que consideran la ampliación del tren subterráneo.
¿Cómo calificaría este año en materia de transporte?
No quisiera ponerle una nota. Creo que este es un aspecto cualitativo y yo diría que ha sido un muy buen inicio para llevar a cabo el programa de gobierno y hemos acelerado mucho en varias direcciones, particularmente en la infraestructura. Así que ha sido muy positivo, acelerado, con una sensación de urgencia en muchas áreas, pero los desafíos siguen siendo muy importantes.
Pero las fallas que tuvo Metro no dejó esa sensación en la gente
Los problemas que hemos sufrido en Metro este año ciertamente fueron momentos difíciles, inesperados también, por lo cual se ha rectificado y se puso en marcha un plan de mejoramiento. Ha sido un año en que hemos partido corriendo, pero tenemos que mantener ese ritmo para el 2015 y empezar a cosechar las cosas que hemos sembrado.
¿Cómo cree que afectaron las fallas de Metro a los santiaguinos?
Causó mucha molestia, mucha incomodidad, por cierto no es algo de lo que yo pueda estar feliz, pero fueron situaciones anormales. Una cosa que hay que dejar clara es que los accidentes siempre van a ocurrir en infraestructura como la de Metro, pero espero que con el plan de mejoramiento para Metro estemos ya superando esa crisis.
¿Cree que quizás esa fue una de las lecciones que dejó el 2014?
Yo diría que hay dos lecciones importantes. Una, en el caso de Santiago, es la fragilidad que tenemos en la red del tren subterráneo que todavía está en crecimiento, es decir, tenemos que cuidar mucho más la operación para evitar los incidentes como los ocurridos este año. En regiones diría que lo que es muy importante es avanzar en el corto plazo en los perímetros de exclusión, o sea áreas reguladas que permitan, a cambio de una transferencia de parte del Estado, mejorar la frecuencia, la cobertura, los horarios, la edad de los buses y disminuir la tarifa adulto en las ciudades intermedias que no tienen este beneficio actualmente. Estamos pensando en Temuco, Valdivia, La Serena, Coquimbo, entre otros.
Y en cuanto al Transantiago ¿Se piensa mejorar la frecuencia y regularidad del servicio?
Efectivamente, trabajamos en eso ahora, con los servicios críticos. En enero viene un nuevo plan operacional que conlleva varios cambios. Seguiremos empujando, en primer lugar, en reducir la evasión, mejorar los índices operacionales, la calidad de servicio y también aumentar la cobertura y las mallas de recorridos para brindar un mejor servicio para los usuarios. Así que esperamos terminar el 2015 con servicios que operen con mejor frecuencia y regularidad que los actuales.
Pero la infraestructura no está lista aún para mejorar la frecuencia
Hay algunos tramos que van a estar para el 2015. Algunos de Dorsal y Vicuña Mackenna, pero por cierto, la infraestructura toma más tiempo. Es muy importante la señal de que estamos avanzando en ese sentido, pero también hay otras cosas más pequeñas que se pueden hacer para mejorar la calidad de servicio que es en lo que estamos trabajando. Como por ejemplo, la semaforización, para darle más prioridad al transporte público. Ya hemos mejorado en Santa Rosa, en la intermodal de La Florida y estamos con muchos proyectos de terminales en ruta.
Uno de los grandes logros de este año fue la aprobación de la Ley Emilia, en este sentido ¿Habrán mayores exigencias para los conductores?
Ya se han introducido mejoras en el examen y se ha homogeneizado a nivel nacional, lo cual es un tema importante. Creemos que el avance ahora tiene que ir más por el lado de la fiscalización,
¿Qué medidas se tomarán para fortalecer la fiscalización?
Estamos poniendo mucho énfasis en la tramitación de la ley del control automatizado de tratamientos de infracciones. Ya hemos avanzado en el control de la normativa con respecto a la conducción en estado de ebriedad, en accidentes que causan la muerte o lesiones graves y gravísimas. El control del exceso de velocidad es otro elemento muy importante en los accidentes de tránsito en nuestro país. Así que el objetivo es seguir disminuyendo y seguir atacando todos los frentes que tengan que ver con seguridad vial. (La Tercera)
