Una licencia médica hasta fines de julio presentó el senador Iván Moreira (UDI), presidente de la Comisión de Trabajo, quien producto de un tratamiento de salud deberá cumplir un estricto reposo.
La ausencia circunstancial del presidente de la instancia legislativa -quien ha sido un puente en el diálogo entre el gobierno y oposición para destrabar la reforma previsional- es solo uno de los inconvenientes que hasta el momento mantienen congelada la apuesta del Ejecutivo de votar esta semana el mencionado proyecto que moderniza el sistema de pensiones.
La oposición, que hoy controla la sala y la mesa del Senado, también tiene la mayoría y la presidencia de la Comisión de Trabajo, por lo tanto, si la derecha no accede al llamado del gobierno, es imposible que el proyecto previsional se vote esta semana.
La senadora Alejandra Sepúlveda (independiente FREVS), quien integra la mencionada instancia legislativa, dice que el oficialismo está disponible para votar esta semana; sin embargo, admite que la oposición tiene la manija. “Ellos están colocando los tiempos. Deberían colocarla en discusión. Pero vemos que no hay ninguna intención en acelerar y no sabemos quién va a presidir la comisión. Si ellos tienen la presidencia (de la comisión), tienen la mayoría, a lo más podemos patalear”, agrega la legisladora.
“La oposición está parapetada con una mayoría en la comisión, 3 contra 2, y en la sala, 27 contra 23. Están refugiados. Cometen un error. No están escuchando lo que la ciudadanía quiere. Espero que la derecha reconsidere este factor”, señala el senador Gastón Saavedra (PS), quien también forma parte de la Comisión de Trabajo.
El interés de votar esta semana, al menos la idea de legislar (votación en general), había sido anunciada la semana pasada por la ministra secretaria general de Gobierno, Camila Vallejo (PC), postura que luego fue ratificada por la titular del Trabajo, Jeannette Jara (PC).
Pese a ello, la convocatoria de la Comisión de Trabajo para este miércoles no se ha cambiado. El problema es que el único que podría cambiar, por ahora, la citación es el mismo Moreira.
Si bien será reemplazado en la sesión de este miércoles y hasta fines de julio por el senador Juan Antonio Coloma (UDI), la presidencia debe ser resuelta por la mayoría de los miembros de esa instancia legislativa, que también integran Rodrigo Galilea (RN) y Luciano Cruz-Coke (Evópoli). Ese paso recién podrá cumplirse este miércoles.
Por mientras, la mencionada comisión solo tiene contemplado “continuar con el estudio de la Reforma Previsional”, y para ello tiene invitada a la economista y académica de la Universidad de Los Andes María Cecilia Cifuentes.
Todo este inconveniente reglamentario dificulta que la reforma en cuestión sea votada este mismo miércoles.
Sin embargo, también hay una razón política detrás. La derecha se resiste a votar el proyecto esta semana, aun cuando se trate solo de la idea de legislar.
El senador integrante de la Comisión de Trabajo y presidente de RN, Rodrigo Galilea, en Radio Infinita, dijo que el nudo no estaba “en un tema de plazos, es un tema de contenidos”. “La reforma pasó al Senado prácticamente sin contenido y el poco contenido quedó inorgánico. Para que votemos la idea de legislar tenemos que llegar a una mínima señal de por dónde van las cosas… En materia de pensiones el único que puede hacer indicaciones y llegar con planteamientos al Senado es el Poder Ejecutivo”.
En línea con esa postura, en radio Pauta, el presidente del Senado, José García Ruminot (RN) añadió que “lo que recibimos de la Cámara de Diputados fue un verdadero cascarón, ideas contrapuestas”.
La ministra Camila Vallejo afirmó este lunes que “el gobierno no ha descartado el término de las AFP”, luego de que fuera consultada por los dichos de la presidenta del Partido Socialista (PS), Paulina Vodanovic, quien señaló que no es el momento de ponerle fin a las administradoras de fondos de pensiones.
Vallejo añadió que “eso es parte sustantiva del proyecto para reformar el sistema de pensiones. Nosotros, con la experiencia que hemos tenido, y en esto es compartido el diagnóstico no solamente por parte de los partidos oficialistas, sino que la gran mayoría del país, de que el modelo de las AFP fracasó en entregar las pensiones que comprometió y, por lo tanto, necesitamos pasar a un sistema de verdadera seguridad social. En eso vamos a seguir avanzando como gobierno”.
En esa línea, zanjó que “el diálogo no puede ser excusa para seguir dilatando. Hemos tenido diálogo, hemos tenido conversaciones, pero otra cosa es decir que producto de seguir dialogando no votemos aún la idea de legislar, y eso no puede suceder”. (La Tercera)