Metido de lleno en la vida de los habitantes de ese sector, la mayoría inmigrantes, y junto a su perra «Tiñi» -que lo «adoptó» tras llegar a la población- el religioso jesuita reflexionó sobre la actualidad en una entrevista concedida a la revista «El Sábado» de «El Mercurio».
Consultado sobre la renuncia al sacerdocio anunciada recientemente por el padre Rodrigo Tupper, Berríos manifestó que respeta esa decisión.
«Cuando una persona se separa (en su matrimonio), hay gente que reacciona como que hay que aislarlo, o que tiene que vivir como persona de segunda clase. Cuando un cura se sale, es lo mismo. Pero creo que tanto el estar casado como ser cura es un privilegio, y la persona que ha fracasado en ese privilegio ha perdido mucho, y hay que apoyarla y quererla mucho, y desearle lo mejor», indicó.
«Creo que Tupper fue un buen sacerdote, en lo que yo alcancé a conocer de él. Le hizo muy bien a la Iglesia Católica. Yo respeto su intimidad y le deseo que sea profundamente feliz, y agradezco lo que hizo por la Iglesia», añadió.
Al mismo tiempo, el padre Berríos dijo que cree «que el celibato va a ser algo que va a tener que revisarse».
«Cuando entré a la Compañía (de Jesús), el celibato era un signo de generosidad, un signo que hacía más creíble la entrega que tenías. Pero hoy no es nada de eso. Al revés: es un signo de sospecha y que te hace poco creíble. La gente sospecha de los curas porque somos célibes», plantea.
«Creo que siempre habrá religiosos que tengan voto (de castidad), pero que también se pueda ordenar gente casada», agregó.
En otro plano, Berríos también se mostró de acuerdo con la decisión adoptada por el DT de la selección chilena, Jorge Sampaoli, al «perdonar» al jugador Arturo Vidal luego del sonado accidente que protagonizó a bordo de su automóvil.
El sacerdote comparó esa voluntad de perdón con la que debería adoptar el sistema educacional, a su juicio, con los jóvenes que «se equivocan o son más lentos».
«‘Él (Sampaoli) dijo que los jueces tenían que juzgar a Vidal por lo qu ehizo, pero él no es juez, sino entrenador y, como tal, no se va a tirar alguien para el lado por un error, sino que su responsabilidad es hacerlo crecer. A mí me impactó mucho eso», aseveró.
«Me parece que lo que hizo Sampaoli es lo que debe hacer el sistema educacional en Chile. Que haya autoridad, que se aplique un castigo si es que corresponde, que se le indique al joven que hay cosas buenas y malas, pero hay que tenderle una mano y darle una oportunidad: no echarlo y que se encarguen los liceos municipalizados, que van recibiendo a todos los Arturos Vidales que el sistema va tirando para afuera», explicó.
Sobre los casos que vinculan dinero y política, en tanto, Berríos insistió en que pese al revuelo que han generado, «la mayoría de los políticos son gente honrada».
«Yo no estoy de acuerdo con las triquiñuelas, pero también reconozco como chileno la culpa por no haber, de algún modo, obligado a hacerlas al no buscar un sistema que financiara eso», señaló.
«A cualquiera que haya hecho una boleta se lo trata como ladrón, y yo no estoy de acuerdo. Incluso algunos políticos vinculados con boletas son gente honrada. Hay que tener cuidado de tirar con ventilador a todos», aseveró.