Durante unos 30 minutos, Francisco recibió a Trump en el Vaticano, en un encuentro marcado por las personalidades y posiciones contrapuestas de ambos, en franco desacuerdo en cuestiones clave como el cambio climático, las migraciones, el capitalismo y las relaciones con el Islam.
El presidente estadounidense, un millonario del sector inmobiliario y estrella de programas de televisión, se entrevistó con el pontífice argentino en la biblioteca vaticana tras estrecharse ambos las manos y posar para los fotógrafos, con Trump sonriente y el papa más serio.
Trump llegó acompañado de su esposa Melania y ambos fueron escoltados por los «gentilhombres» del papa y la Guardia Suiza a los apartamentos pontificios. Tras posar para las fotografías de rigor, el presidente estadounidense entró solo en la llamada Sala del Tronetto, anexa a la Biblioteca Privada, donde estrechó la mano de Francisco.
La audiencia con el pontífice debe durar unos 20 minutos.
«UN GRAN HONOR»
El presidente estadounidense agradeció al papa que lo recibiera y aseguró que era «un gran honor» conocerlo, informó el pool de medios presentes en la audiencia. El pontífice, sin embargo, no dijo nada delante de los periodistas, antes de que los dos se marcharan para reunirse a solas.
Tras la reunión, Trump presentó al papa a su delegación y posaron para otra foto con su esposa Melania, su hija Ivanka y su yerno Jared Kushner. En el tradicional intercambio de regalos, Francisco le entregó al mandatario tres documentos papales, entre ellos su encíclica «Laudato Si» sobre cambio climático, además de una copia de su mensaje de paz de Año Nuevo y un medallón con una rama de olivo, informó el Vaticano.
Tras la reunión, Trump presentó al papa a su delegación.
Trump, por su parte, obsequió al papa una colección de los cinco libros escritos por Martin Luther King (uno de ellos, «The Strength to Love» (1963), con la firma del destacado activista afroamericano); así como una pieza del monumento de granito que honra al reconocido activista afroamericano en Washington y una escultura de bronce de un artista estadounidense no identificado, que representa «la esperanza en un mañana pacífico», detalló la Casa Blanca.
A estos obsequios, la delegación estadounidense sumó una fotografía del discurso que el papa ofreció ante una sesión conjunta del Congreso de EE. UU. en septiembre de 2015, en el que Francisco celebró el legado de King.
«Honor de por vida haber conocido a Su Santidad el Papa Francisco. Dejo el Vaticano más decidido que nunca a buscar la PAZ en nuestro mundo», expresó luego Trump a través de su cuenta de Twitter.
Honor of a lifetime to meet His Holiness Pope Francis. I leave the Vatican more determined than ever to pursue PEACE in our world.
TERCERA PARADA
Esta audiencia con el pontífice, dio comienzo oficial a la tercera parada de la primera gira internacional del mandatario estadounidense, que ya visitó Arabia Saudita, así como Israel y los territorios palestinos.
Trump y Melania fueron escoltados por los «gentilhombres» del papa y la Guardia Suiza.
Trump, recibió más tarde al primer ministro italiano, Paolo Gentiloni, en la residencia del embajador estadounidense en Roma, en la que se aloja durante su visita a Italia. El mandatario había regresado regresó a la residencia después de visitar, en el palacio del Quirinale, al presidente de la República italiana, Sergio Mattarella, y tras la audiencia con el papa Francisco.
Este fue el último encuentro oficial programado en la agenda de Trump, quien tras la reunión con Gentiloni partirá con su comitiva a Bruselas, donde se le espera bajo fuertes medidas de seguridad. (DW, efe, n-tv, dpa, afp, ap)
