La instancia, que preside el diputado DC, Matías Walker, tiene la misión encomendada por el Ejecutivo de sacar a la brevedad el proyecto de ley que endurece las penas en caso robo, hurto y receptación. El proyecto, que busca evitar que delincuentes salgan fácilmente en libertad, ha sido respaldada por la DC, el PPD, la UDI y RN.
Sin embargo, la llamada agenda corta contra la delincuencia, que es una de las prioridades legislativas de La Moneda para aprobar antes del 31 de agosto, ha recibido duros reparos de parte de distintas organizaciones e instituciones.
Además de las observaciones críticas que ha expresado la Corte Suprema, el Instituto Nacional de Derechos Humanos y la Fundación Paz Ciudadana, el PC también se desmarcó del apoyo al proyecto.
En la mencionada comisión, la voz crítica ha sido levantada por la diputada comunista Karol Cariola, junto al independiente Giorgio Jackson.
“Lamento tener una contradicción tan fuerte con el gobierno del cual soy parte”, dijo Cariola en la sesión de la Comisión de Seguridad Ciudadana del 22 de abril.
En esa misma sesión, el DC Gabriel Silber salió en defensa del proyecto, emplazando indirectamente a su par comunista: “Quien crea que, defendiendo las cosas en el estado actual, podemos dormir tranquilos, atenta contra la responsabilidad de un parlamentario de cambiar el estado en el que se encuentra nuestro sistema carcelario”.
“Lamento que personeros del PC no se alineen con una ley que refleja el sentir ciudadano con delitos que son los de mayor connotación social y los más frecuentes. Esta es una señal potente para combatir la delincuencia, como lo fue la Ley Emilia para combatir el conducir bajo la influencia del alcohol”, expresó la diputada UDI, Claudia Nogueira.
Aunque el proyecto del Ejecutivo aún no es despachado por la Comisión de Seguridad Ciudadana, en la última semana se avanzó en la votación de algunos artículos, donde las posturas contrapuestas se vieron reflejadas.
Si bien el artículo primero, considerado el corazón de la iniciativa, fue aprobado en lo medular, fue rechazado un punto que endurecía las penas a delincuentes primerizos. Además del voto en contra de Cariola, también expresaron sus dudas sobre esa medida Silber y el diputado PS Leonardo Soto.
La posición de Cariola no es aislada dentro de su bancada, donde existen reparos de forma y de fondo al proyecto. A juicio de los legisladores comunistas, la normativa propuesta por el gobierno no soluciona la reincidencia, aumenta en forma desmedida la población penal, agrava las sanciones a delitos contra la propiedad por sobre aquellos que atenten contra las personas y hace rígidas las penas para delincuentes primerizos.
“Algunos penalistas han dicho que este es un proyecto de populismo penal, que puede ser aplaudido por la galería, pero que no trae soluciones concretas. Mientras más penalización, mientras más personas se meten a la cárcel, más reinciden”, dijo la parlamentaria PC.
“Estamos convencidos de que más que seguir metiendo más gente a la cárcel, tenemos que hacer procesos de reinserción que nos permitan llevar a esos jóvenes que hoy están delinquiendo por caminos distintos. Hoy, sólo el 20% de la población penal tiene programas de reinserción”, dijo.
Cariola agregó que “este proyecto, a lo que aspira es a aumentar las penas sobre todo en aquellos delitos que tienen que ver con la propiedad privada. No se incorporan robos con violencia, delitos con violación. ¿Uno se pregunta por qué el robo de un cajero automático es más importante, es más crudamente penalizado que una violación?”.
