¡Reforma laboral, ahora!, partió diciendo la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, durante el discurso que puso fin a la marcha convocada por la multisindical para conmemorar el 1 de Mayo.
En la ocasión, la líder de la Central Unitaria de Trabajadores defendió el debate del proyecto de ley «entendiéndolo como un pilar fundamental para la superación de la desigualdad», sobre todo, porque -dijo- «fortalece la actividad sindical y la negociación colectiva, garantizando la redistribución de las ganancias para superar la realidad actual».
«Si hoy estamos debatiendo una reforma laboral es precisamente por este camino de estrategias construidas, no nos ha sido regalado este paso (…) Quienes creemos en la urgencia de cambios en este pais, no seremos los que cierren la puerta o que por la vía de críticas extremas terminemos en la vereda de los empresarios o de aquellos que rechazan la reforma por defender sus mezquinos intereses», dijo.
En esa línea, reiteró que «no todos rechazamos la reforma laboral, ya que caer en ese juego es entregarle en bandeja a los poderosos de siempre».
Por ello, además de reconocer el trabajo de los parlamentarios oficialistas en el Congreso, emplazó a la Nueva Mayoría a alinearse detrás de la iniciativa. «La Nueva Mayoría cuenta con los votos para aprobar este proyecto y cuando se trata de cumplir lo prometido no se debe tener temor a ejercer las mayorías que la ciudadanía les ha entregado. Esperamos que no existan dudas ni matices dentro de la Nueva Mayoría para avanzar e incluso profundizar más aún el proyecto de ley que moderniza las relaciones laborales», dijo.
Y añadió: «No podemos bajar la guardia. Sabemos de las presiones que están ejerciendo los grupos de poder, como el empresariado, para detener los avances y estas presiones serán cada vez mayores y además serán representadas dentro del Parlamento de parte de quienes defienden sus intereses de clases».
«Este proyecto va a fortalecer a la pequeña y mediana empresa, no se escondan detrás de las polleras de las Pymes los grandes empresarios que hoy las tienen ahogadas (…) No se escondan detrás de ellas para esconder finalmente sus intereses mezquinos», aseveró Figueroa, al tiempo que anunció una marcha para el mes de julio.
PLEBISCITO
La presidenta de la multigremial, asimismo, expresó su defensa a las reformas estructurales propuestas por el Ejecutivo. «Estamos pasando a la ofensiva como movimiento sindical, no restándonos de ningún espacio o debate (…) estamos en la vereda de los grandes cambios, pero también esperamos que esta disposición expresada sea asumida por el Gobierno como una urgencia», dijo.
En ese sentido, hizo un llamado a la Mandataria Michelle Bachelet para que haga «un plebiscito que defina el mecanismo para construir la nueva Constitución para Chile». «Llamamos a legislar para que se faculte al Presidente de la República a convocar a un plebiscito para definir el mecanismo en que se realizará la nueva carta fundamental. No debemos temer al pronunciamiento de la sociedad, menos cuando se trata de definir la nueva Constitución para Chile», aseguró.
Apuntó además que «los cambios llegaron para quedarse y profundizarse porque ya no resiste más este sistema, ante esta realidad nos rebelamos, actuando para que los cambios se profundicen (…) Los trabajadores no le tenemos miedo a la mayoría popular y están cansados que todo sea discusiones de alturas sin consultar la soberanía nacional».
«La crisis no puede ser aprovechada por los que no quieren cambios. El empresariado ha sido claro, ellos no quieren ninguna reforma y hoy chantajean con la inversión para impedir el debate constitucional», concluyó.