Profundizar las relaciones bilaterales y representar los intereses del Estado. Esas son los principales objetivos de las embajadas que el país posee repartidas en el mundo según la página web del gobierno de Chile. Un objetivo que 1.250 funcionarios, repartidos en 73 embajadas y 10 misiones diplomáticas ante organismos internacionales, deben cumplir con un presupuesto de levemente inferior a los US$ 36 millones, según datos a los que accedió Emol. Por lo mismo, la distribución del personal y los recursos es muy disímil.
Desde la Cancillería señalan que el criterio para distribuir el personal de las misiones diplomáticas de Chile en el extranjero «es un proceso metodológico que considera objetivos políticos, consulares y económico–comerciales». De hecho, agregan, «como la dotación en el extranjero está fijada por ley (y data de los años 70) los nuevos proyectos, tales como la apertura de embajadas en Guyana, Etiopía e Irán se materializan con la reasignación de funcionarios y rebajando necesariamente la dotación en otras misiones, efectuando un esfuerzo de gestión». Sin embargo, añaden, «existe un criterio central que se funda en la intensidad y densidad de las relaciones que se mantienen con cada país».
Países con más y menos funcionarios En ese contexto, los países que concentran la mayor cantidad de funcionarios son Argentina, Brasil, Perú, Estados Unidos, España, China, la ONU, Alemania y Francia (ver tabla). En el caso de los tres primeros países, «ello está en concordancia con los objetivos estratégicos de política exterior. Así, por ejemplo, nuestras embajadas en América Latina, concentran un número importante de funcionarios diplomáticos, pues es fundamental atender los numerosos temas de la agenda vecinal, especialmente», comentan desde el ministerio de RR.EE. 3 funcionarios posee la embajada de Chile en Irán
«También privilegiamos a los países con los que tenemos una relación especial; donde hay cooperación bilateral y multilateral en materias de prioridad para el desarrollo del país, entre ellas la innovación, la ciencia, mundo académico, cooperación judicial y, de manera importante, el intercambio comercial», agregan. En el otro extremo se encuentran las representaciones de Chile en Etiopía e Irán, que tienen tres y dos personas. De acuerdo a Cancillería son embajadas de reciente apertura y en proceso de consolidación, al igual que Guyana. «Por ahora, se ha definido que operarán con dotaciones acotadas; y, en el caso de Etiopía, se utiliza el edificio de la Embajada de México, bajo el proyecto de embajadas compartidas que se ha generado al interior de Alianza del Pacífico, como también es el caso de Ghana, Marruecos, Argelia y la misión ante la OCDE», explican.
Respecto al papel que desempeñan los diplomáticos allí destacados, su misión «es la identificación de objetivos políticos y económico-comerciales que nos permita la generación de una activa agenda bilateral y multilateral con esos países. Es el caso de Guyana, que es la sede de Caricom, y Etiopía, que es sede de la Unión Africana y otras instituciones regionales de África». Presupuesto El presupuesto total para las embajadas en 2015 fue de 35.668.885 millones de dólares y, para este año, fue de 35.937.151 millones de dólares y, desde el ministerio, aseguran que se trata de un «presupuesto de continuidad». En total, gasto en este ítem representa el 0,54% del Presupuesto Público del país. 0,54% del Presupuesto Nacional representa el presupuesto de las misiones diplomáticas Específicamente, la ONU (US$ 1.670.974), Argentina (US$ 1.526.892), Estados Unidos (US$ 1.318.366), Japón (US$ 988.607) y Alemania (US$ 986.959) son las representaciones con más recursos. Por el contrario, Indonesia (US$ 152.056), Nicaragua (US$ 128.918) e Irán (US$ 89.180) son las que tienen menos. «El presupuesto operacional anual en dólares del Ministerio de RR.EE., que es un presupuesto de continuidad en los dos últimos años y que sólo representa el 0,54 por ciento del Presupuesto Público total, permite la gestión de las embajadas y consulados, incluyendo el pago de salarios a los funcionarios contratados localmente (más de 850), la mantención de edificios fiscales, comunicaciones y gastos de representación. Esta partida está sujeta a múltiples adecuaciones, entre ellas el tipo de cambio y la variación del costo de vida en cada país. Este es un presupuesto esencialmente de continuidad», detallan.
«Se debe considerar que dichas cifras corresponden al pago de arriendo/mantención de los inmuebles, el costo anual de las dotaciones, el costo de los servicios en cada país y factores similares», añaden. Respecto a como se elabora la repartición de recursos, en el Ministerio de Relaciones Exteriores señalan «que las misiones, en junio de cada año, prepara y justifica la proyección del presupuesto operativo para el año siguiente, incluyendo variables tales como tipo de cambio proyectado, un eventual aumento del pago de arriendo por obligaciones contractuales, ajustes salariales obligatorios, reparaciones mayores en edificios fiscales y similares. Esta proyección luego es validada o ajustada por el Ministerio de Hacienda». 47 de los 197 inmuebles que gestiona Chile en el extranjero pertenecen al Fisco Respecto a los inmuebles que gestiona Chile en el exterior, estos son 197, de los cuales 47 son propiedad fiscal, entre embajadas, consulados y misiones ante Organismos Internacionales. «Las posibilidades de adquisición de inmuebles en el exterior están siempre sujeta a la disponibilidad presupuestaria. Además, los edificios fiscales comprometen importantes recursos para su debida mantención, ítem que es insuficiente en el caso de la Cancillería. Considerando la actual coyuntura de recursos fiscales disponibles, no está contemplada la adquisición de nuevos inmuebles», recalcan.
Emol
