Tanto parlamentarios como el Servicio Electoral (Servel) han realizado críticas al Registro Civil por el cambio de domicilio que se le han hecho a miles de votantes en el padrón electoral. De hecho, el director del Servel, Patricio Santa María, indicó que hasta ahora se conoce que 485 personas cambiaron su domicilio electoral, sin previo consentimiento, debido a una falla en el sistema del Registro Civil, de lo cuales se tiene conocimiento que 10 mil corrigieron su dirección.
Sin embargo, «el Registro Civil aún no nos puede decir cuántos pidieron cambiar (su domicilio) y cuántos no. El software produjo que cada trámite podría ser un cambio de domicilio. Hay personas que fueron a cambiar carné de identidad, cambiar de pasaporte y donde en ese traspaso pasaban inmediatamente y nos informaban el cambio de domicilio». Frente a esto, el Director del Registro Civil, Luis Acevedo, indicó que las críticas realizadas hacia el organismo «son válidas» y recalcó que «hoy día estamos preocupados en cómo trabajamos conjuntamente con el Servel para mejorar el flujo de información».
En esa línea, Acevedo ejemplificó que «en el mes de agosto oficiamos al Servel información separada respecto de las personas que están detenidas por desaparición forzada, mayores de 100 años (…). Esto para colaborar con el Servel en su misión de confeccionar el padrón electoral». Además, desde el organismo encargado de llevar el registro de las personas, aseguraron que mantienen una mesa de trabajo con el servicio electoral para disponibilizar la información online puesto que hoy se entrega en un CD.
En cuanto a las causas relacionadas al cambio de domicilio de cientos de votantes en el padrón electoral de las próximas elecciones municipales, Acevedo sostuvo que «en el año 2013 se produjeron ajustes informáticos respecto del campo de domicilio en nuestro sistema el cuál nosotros hemos relevado al Servicio Electoral». Sin embargo, respecto al responsable por esta anomalía desde el Registro Civil recalcaron que «nosotros no hemos hablado de responsabilidad ni de quien tiene la culpa».
Emol/Agencias