No están contentos. No son uno, no son dos, sino que son varios los motivos por los que un sector de los alcaldes frenteamplistas son críticos de la relación con el Ejecutivo. Aunque algunos de los jefes municipales ponen paños fríos y hablan de una “sobreexpectativa” de sus pares respecto a la instalación de un gobierno afín a sus administraciones.
Pero quizás el ejemplo más evidente de la “tensión” entre los ediles y el gobierno lo protagonizó -de forma pública- la jefa comunal de Viña del Mar, Macarena Ripamonti (RD). El pasado 10 de septiembre, la alcaldesa emplazó al Presidente Boric para que su comité de ministros rechazara “en menos de 72 horas” el proyecto de saneamiento en playa Las Salinas, luego de postergarse producto del cambio de gabinete.
“Tiene que resolver el comité de ministros (el proyecto de saneamiento) en menos de 72 horas. Yo le quiero decir al Presidente, con toda la mano bien abierta, si firmaron como gobierno para hacer justicia ambiental (haciendo alusión al Tratado de Escazú) realmente tienen que aplicarlo a la hora de resolver en menos de 72 horas este conflicto ambiental”, advirtió en esa oportunidad la alcaldesa.
Tras el ultimátum de Ripamonti, la mañana del 12 de septiembre, el ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson -también RD- sostuvo que se contactó con la alcaldesa. “Le hemos hecho saber que para este gobierno, por cierto, la prioridad siempre va a ser el diálogo, la participación y el cuidado del medioambiente”, señaló.
Si bien luego de que el comité de ministros que acogiera de forma parcial las reclamaciones respecto al emblemático proyecto de Copec en Las Salinas “agradeció” al gobierno, la molestia de Ripamonti no quedó ahí. El domingo pasado, y durante la jornada donde se convocó a la militancia del Frente Amplio -con cargos de representación- a San Miguel para poder hacer un análisis posplebiscito, varios de los presentes confirman una “dura” intervención de la alcaldesa.
En la oportunidad, la jefa comunal también planteó malestar por la relación del mundo municipal (y sus representantes) con el gobierno, hablando una posición privilegiada de ciertos personeros para acceder al Presidente Gabriel Boric, versus quienes no sostienen relaciones de cercanía con el Mandatario. Las palabras de Ripamonti no cayeron nada de bien, particularmente en los ministros allí presentes. Las mismas fuentes afirman que una de las secretarias de Estado, de hecho, se paró de su asiento a hablar con la alcaldesa RD una vez que terminó su intervención.
Quien también dio algunas palabras fue la “dueña de casa”, la alcaldesa de San Miguel, Érika Martínez (CS), la representante comunal también planteó preocupación por la “distancia” entre autoridades del Ejecutivo y el mundo municipal, aunque los presentes aclaran que su discurso lo hizo “en buenos términos”.
Presentes en la jornada señalan que parte de la molestia de Ripamonti se “desató” porque en el itinerario de intervenciones estaban los ministros -señalan que habló la titular de Mujer, Antonia Orellana (CS); y el jefe de Educación, Marco Ávila (RD)-, representantes parlamentarios (como Catalina Pérez, de RD) pero no los jefes comunales. Finalmente, desde los ediles, habló Ripamonti, Martínez y Tomás Vodanovic (RD) de Maipú, quien -afirman- trató de apaciguar las aguas tras la intervención de la representante de Viña del Mar. Ripamonti no dio respuesta a los contactos de La Tercera PM.
Aunque algunos apuntan a razones más profundas. “Cuando recién se instaló el gobierno, había unas expectativas desmesuradas de los alcaldes, impaciencia, la idea de que iba a existir una línea demasiado directa, queríamos que todos los ministros nos recibieran”, dice una jefa comunal del sector.
Otro dato que arguyen los ediles del FA es que con el pasar de los meses, y cuando ya se había entablado una relación más fluida con el subsecretario de Desarrollo Regional, Miguel Crispi fue removido de su cargo y aterrizó en el Segundo Piso. En su lugar, llegó el personero del PC, Nicolás Cataldo.
Eso, en parte, resintió las relaciones particularmente con RD. Aunque con el pasar de las semanas, algunos hacen un matiz. “(Nicolás) Cataldo conoce bien el trabajo municipal por su trabajo con el alcalde Mauro Tamayo y está haciendo una buena pega”, dicen.
En ese contexto, generó suspicacias en el bloque que la alcaldesa de Ñuñoa, Emilia Ríos (RD) incluyera en su recurso de protección -a propósito de los tres conciertos de Daddy Yankee en el Estadio Nacional y los incidentes en la misma comuna a raíz del evento- a la Delegación Presidencial Metropolitana, dirigida por Constanza Martínez (CS).
Aunque la acción tomó por sorpresa a la Delegación, allegados a ambas personeras afirman que una vez que se hizo pública la acción, hubo contacto entre los gabinetes de ambas, y se le explicó a la autoridad metropolitana que solamente correspondía a una “medida administrativa” dado que es la Delegación quien autoriza este tipo de eventos masivos. Como sea, y para aplacar cualquier duda, hoy Ríos destacó el trabajo de la Delegación Presidencial afirmando que “ante los incidentes y falta de seguridad del primer día supo responder y coordinar a los actores involucrados para mejorar las condiciones del evento”.
Sobre la tensión entre ediles y el Ejecutivo, la alcaldesa de Valdivia, Carla Amtmann (RD) tiene una visión optimista de cómo han evolucionado las relaciones. “El incremento en recursos para proyectos Subdere fue histórico, y la instrucción del presidente de trabajar con los gobernadores y alcaldes desde todas las carteras sectoriales se notan en el territorio. Obviamente que la estructura centralista del estado aún pone muchos límites pero tenemos un Gobierno que como nunca se está esforzando para ir a contracorriente de esa cultura centralista y lograr revertirla”.
Parecer similar tiene Vodanovic desde Maipú. “Hoy vemos un gobierno que escucha al mundo municipal y que ordena sus prioridades en función de los problemas que más aquejan a la gente. Nuestra relación con el gobierno es cercana y de mucha colaboración. Generando un trabajo conjunto en pos de resolver temas prioritarios para la comuna, como lo fue la recuperación de la Plaza de Maipu, donde municipio, gobierno, Carabineros y privados trabajamos en equipo para resolver problemas concretos que aquejan a nuestros vecinos”, concluye. (La Tercera)