El sector salmonicultor no pasa por sus mejores temporadas. En medio de una paralización de las inversiones en el país, con un número importante de centros de acuicultura que se encuentran inactivos, el descenso en los precios internacionales del salmón han golpeado aún más su desempeño dentro de la canasta exportadora chilena. Pese a que la industria chilena ostenta ser el segundo productor mundial de salmones, y que en 2023 se erigió como el segundo sector que mayor valor aporta en el comercio exterior de Chile, después del cobre.
Así lo reflejan los datos acumulados a noviembre que publica el Banco Central, donde la industria contabiliza, al considerar los envíos tanto de salmones como truchas, un total de US$5.768 millones en los primeros once meses del año. La cifra muestra una reducción de 3% frente al mismo período del año previo, y representa un 6,4% del total de exportaciones realizadas en lo que va de 2024.
Ello la ubica detrás del sector frutícola, que entre enero y noviembre acumula exportaciones por US$6.968 millones, alcanzando un 7,7% del total. El desempeño considera los envíos de uvas, manzanas, peras, arándanos, kiwi, ciruelas, paltas y cerezas. Estas últimas, impulsaron en desempeño del sector, ya que sólo en enero registraron envíos por U$1.886 millones, marcando el registro histórico para el producto estrella del sector frutícola.
Con el desempeño en lo que va del año, la industria frutícola supera en un 20% lo visto en el mismo período de 2023, lo que explica su salto en el podio.
Así, la industria salmonera chilena tuvo durante sólo un año el puesto como el segundo sector exportador chileno, después del cobre. Pero en lo que va de 2024, incluso está virtualmente empatada con otro relevante sector exportador nacional: el forestal. En 2023, dicho industria exportadora acumuló envíos por US$5.542 millones, quedando en cuarto lugar ese año, superada por el sector frutícola, la industria salmonera, y por supuesto la minería del cobre.
Sin embargo, en lo que va de 2024, el sector forestal acumula exportaciones por US$5.764 millones, un aumento de 12% en relación a lo visto en 2023. El salto la deja en el mismo 6,4% del total de bienes exportados en lo que va del año, igual número de la industria salmonera.
Para Arturo Clement, presidente de Salmon Chile, si bien el resultado anual confirma la relevancia de los alimentos como rubros exportadores en el país, también pone de manifiesto la deprimida realidad que enfrenta el sector.
“Nos parece muy positivo que dentro de los tres principales sectores exportadores de Chile, dos sean del rubro alimentos. Tras la minería, la fruta (impulsada por las cerezas) y el salmón dan cuenta del tremendo potencial que tiene Chile en ser una potencia alimentaria y aportar al desafío de alimentar al mundo”, dijo a Pulso.
Agregó que el hecho de ceder terreno en el comercio exterior chileno es una “prueba de que la salmonicultura necesita mejores condiciones para poder seguir desarrollándose y aportando a la economía nacional”.
“Tenemos un enorme potencial de crecimiento y el país está desaprovechando esta oportunidad de desarrollo y creación de bienestar social”, enfatizó.
La pérdida de relevancia del sector exportador contrasta con el análisis que han realizado economistas como Raphael Bergoeing. En una presentación realizada este año, el presidente de la Comisión Nacional para la Productividad relevaba que Chile es el segundo productor mundial de salmón, cuya exportación “es el mayor rubro tras el cobre y litio, Y es el sector de recursos naturales no cobre que más ha contribuido al crecimiento durante 1996 – 2019″
Además, remarcaba que “la salmonicultura se ha desarrollado sin requerir mayores recursos del Estado, como el subsidio a las plantaciones forestales, las inversiones en caminos y puertos, o los programas de apoyo a productores en la fruticultura”
MENORES PRECIOS Y PRODUCCIÓN
Otro de los factores que inciden en el pobre desempeño salmonicultor durante 2024 pasan por factores productivos y de mercado. Y es que la producción de los centros de cultivo viene enfrentando dificultades importantes. Por ejemplo, durante 2023 y de acuerdo con el anuario estadístico de Sernapesca, de los 2.554 centros de acuicultura que registraron operaciones en el país, sólo 1.506 obtuvieron cosechas. Eso sí, del total, sólo 1.814 corresponden a peces, donde se encuentran los cultivos de salmón atlántico, salmón coho y trucha arcoiris.
El precio, en tanto, ha sido oscilante. Después de alcanzar un peak en el año 2022, los valores del salmón a nivel internacional han ido en descenso. Según información de Skills, el valor de cada la libra en Estados Unidos, el mayor mercado de exportación de salmones para el país, ha rondado los US$5,50.