El próximo 4 de septiembre el país vivirá una jornada histórica, donde los millones de chilenos deberán decidir el destino de la Propuesta de Constitución en un Plebiscito que tiene varias particularidades.
Entre ellas, está el retorno al voto obligatorio, pero además no habrá aporte fiscal para quienes participen de la franja o la propaganda, tanto por el Apruebo, como por el Rechazo.
Así lo detalló en su oportunidad el presidente del consejo directivo del Servel, Andrés Tagle.
Según precisó la autoridad del organismo electoral, el máximo de aportes que un partido puede recibir en una sola donación son 500 UF, es decir, unos 16 millones de pesos.
Para organizaciones de la sociedad civil y parlamentarios independientes, los topes de financiamiento son de 500 y 60 UF, respectivamente.
Al mismo tiempo, Tagle indicó que cada aporte se debe reportar al Servel con un máximo de tres días de haberlo recibido, dineros que solo pueden provenir de personas naturales.
Según datos del Servel publicadas por Plataforma Contexto, del total de donaciones recibidas hasta la fecha, el Apruebo ha recibido un 1%, contra el 99% del Rechazo.
Estas diferencias también se muestran en las cantidades que han sido donadas. Por ejemplo, el monto máximo para el Apruebo alcanza los $297 mil, mientras que para el Rechazo, la cifra más alta entregada llega a los $4 millones.
Cabe destacar que las personas naturales que donan, tienen la posibilidad de mantener en reserva su identidad o, por el contrario, hacerla pública.
Entre los nombres que son públicos, destacan el exministro de Economía del primer gobierno de Sebastián Piñera, Félix de Vicente, con $2 millones 800 mil.
No obstante, su donación es superada por casi el doble por el empresario de la construcción, Luis Bravo, quien donó $4 millones a la organización “No más víctimas”.
Esta última es parte de la “Franja Ciudadana por el Rechazo”, vinculada a Chile Vamos y Republicanos, según consigna Interferencia.
El tercer donante es el empresario ganadero Cristián Hott Stange, quien entregó $2 millones; junto a Mónica Hott, dueña de Lecherías Osorno y accionista minoritaria de Soprole, con $1 millón 750 mil.
Un monto similar donó uno de los mayores accionistas de Colún, Carlos Momberg Bórquez, que aportó a la organización “Lecheros del Sur por Chile”. (Bio Bio-Interferencia)