El diputado de la Unión Demócrata Independiente (UDI), Ernesto Silva, dejó la presidencia de su partido el miércoles pasado, tras haber tomado la decisión la noche anterior y haberla informado a la mesa directiva, con el objetivo de «provocar un remezon» que garantizara la unidad al interior de su bancada.
Así lo afirmó a El Mercurio en una entrevista publicada hoy, donde además aseguró estar «convencido de que la renovación de la UDI seguirá siendo un proceso fundamental, que nos va a permitir seguir siendo un partido que lidere las transformaciones que Chile necesita en los próximos 30 años».
En cuanto a su renuncia, el gremialista dijo que tomó la decisión para «provocar la unidad en el partido y asegurar que la renovación siga con fuerza».
Igualmente, catalogó como este episodio como su primera gran derrota política, «pero estoy convencido de que esta decisión va a ser una contribución al éxito del proceso que inicié».
UDI Y PENTA
«Para nadie es un misterio que Carlos Alberto Délano es mi tío, siento un afecto muy grande por él», señaló Silva.
Sin embargo, agregó que «pero creo que en estos meses, tanto en la UDI como en la opinión pública, ha quedado clarísimo que he tenido en todo momento claro mi rol como presidente de la UDI».
«Creo que eso se ha visto con nitidez y es lo que correspondía hacer», manifestó.
Igualmente indicó que no ha visitado al controlador del holding en el anexo de Capitán Yaber, donde se encuentra cumpliendo la medida cautelar de prisión preventiva desde el sábado 7 de marzo.
MOMENTO COMPLEJO
Por otra parte, el parlamentario dijo que la «UDI de hoy vivie un momento difícil, por un escenario político complejo. Una Nueva Mayoría que quiere destruir las bases de desarrollo que Chile y, además, por procesos judiciales que han sido complejos».
En esa línea reiteró que el partido está en un proceso de renovación y cambio «que ya partió y que no vuelve atrás». (La Tercera)
