Si bien en el Socialismo Democrático se ha instalado la preocupación por el resultado en las primarias del domingo pasado, principalmente por la situación de la Región Metropolitana, las críticas y los debates internos están lejos de ser el único efecto que tuvo esta elección en el oficialismo.
En los últimos días al interior de los partidos de la ex Concertación, más allá de la autocrítica interna, se ha vuelto a instalar el debate de hasta dónde se debe llegar en la sociedad con Apruebo Dignidad, y si es posible seguir sosteniendo esta alianza en la próxima elección parlamentaria y presidencial, lo que es un anhelo del Presidente Gabriel Boric.
Algunos señalan que las primarias precipitaron la idea de que en la próxima presidencial se debe descartar una primaria con ese sector y que lo más realista es competir en primera vuelta con candidato y lista parlamentaria propia.
RETORNO DE LA «TESIS DEL REEMPLAZO»
La reflexión surgió luego de la molestia que generó el discurso de triunfo que tanto el Frente Amplio como el PC salieron a instalar públicamente.
«Estamos muy contentos con Valparaíso, Peñalolén, Providencia, Rancagua, comunas que son muy importantes para la construcción de mejores comunas para los chilenos, pero también porque hemos construido una alianza que es de 11 partidos, donde hemos logrado ponernos de acuerdo», dijo la noche del domingo el presidente de Convergencia Social, Diego Ibáñez.
Pero en los hechos, dicen en el Socialismo Democrático, eso no es real, y al interior de las directivas ese discurso fue leído como una constatación de que el FA y el PC no han abandonado la «tesis del reemplazo», con la que buscan tener la hegemonía de la izquierda.
En el Socialismo Democrático acusan deslealtad. Y que en ese sector han intentado transformar una elección con poca participación en un hito político que los ponga en una mejor opción para lo que queda en las negociaciones y también para las próximas parlamentarias.
“No es posible que estemos buscando quiénes fueron ganadores o perdedores a partir de 45 primarias”, sostuvo el miércoles la presidenta del PS, Paulina Vodanovic, en Radio Infinita. Y agregó: “Hemos hecho un proceso por meses para tener candidaturas únicas y eso es lo valorable (…) si caemos en esta trampa de quien ganó el día domingo lo único que hacemos es perjudicar la unidad”.
PARLAMENTARIAS Y PRESIDENCIALES SEPARADAS
En la última semana al interior de los partidos se habría reactivado la idea de que ha sido un error confiar en Apruebo Dignidad y someterse a una primaria con ellos.
En el PS, el PPD y la DC, sostienen que este tipo de instancias sólo benefician a quien más capacidad de acarreo tiene y que no son representativas. De ahí que incluso en el oficialismo se haya abierto un debate para reformar la ley y hacer que las primarias sean obligatorias.
Sin embargo, la tesis que más fuerza ha tomado, es que lo ocurrido esta semana es una muestra de que no existe una verdadera alianza y que el Socialismo Democrático más la DC deben comenzar a competir separados de Apruebo Dignidad.
Esto, pensando también en la próxima presidencial y parlamentaria, donde los expertos del sector ya han estado haciendo análisis que respaldan la idea de que ni siquiera hay posibilidad de generar una lista parlamentaria común con Apruebo Dignidad.
Por esto, el escenario más realista es competir en primera vuelta con lista parlamentaria y candidato presidencial propio.
Al interior del PS y el PPD, sin embargo, advierten que esta idea podría generar que se precipite una presión sobre las directivas para que los partidos tomen postura más claramente y se diferencien del gobierno, como ya estaría sucediendo en el Partido por la Democracia, que dirige el senador Jaime Quintana.
CLIMA DE TENSIÓN PARA LAS MUNICIPALES
La tensión generada tras las primarias, advierten en el oficialismo, ha subido la tensión de cara a las municipales, donde apuntan se ha transformado también en una medición de fuerzas entre las «dos izquierdas».
En el Socialismo Democrático, de hecho, ya hay quienes sostienen que no se puede dejar pasar el resultado que obtenga Apruebo Dignidad en las comunas icónicas que salieron a festejar. Un ejemplo, dicen, es Providencia, comuna que probablemente pierdan a manos de la derecha, lo que echaría por tierra la idea de que tenían una mayoría real en esos sectores.
Incluso advierten en el PS, en varias de esas comunas tenía mas posibilidades un candidato del Socialismo Democrático, pese a haber perdido la primaria.
En ese partido advierten, además, que para nadie es un misterio que el resultado en la municipal marcará de forma importante el camino que sigan en adelante. En la tienda que dirige Vodanovic, apuntan a que esta elección puede devolverle el peso histórico al PS frente al FA y el PC.
Otra idea que se ha instalado tras la primaria es abrir la competencia en gobernadores regionales, negociación que es la que más preocupa en el oficialismo.
Una medición de fuerza en esta elección, dicen algunos en el Socialismo Democrático, podría preparar lo que vendrá en la próxima parlamentaria y presidencial.
«Chile necesita un clima de colaboración, pero si alguien todavía no supera la tesis del reemplazo, la competencia va a ser dura», aseguró el diputado de la bancada PPD, Jaime Araya.
EL LEGADO DE BORIC EN DUDA
Este escenario implica un duro golpe a las expectativas del Presidente Gabriel Boric, quien ha apostado su capital político por mantener la unidad de la izquierda.
Para el Mandatario, una de las hojas de ruta para la última fase del gobierno ha sido apostar por la unidad del oficialismo. Algunos señalan que este es parte del legado que Boric busca dejar una vez terminado su mandato.
En marzo, en el marco de la fiesta de los abrazo del PC, el Presidente hizo un llamado a la unidad para la última fase. Destacando el resultado obtenido en el plebiscito del 17 de diciembre, sostuvo que «logramos un importante resultado luego de dos importantes derrotas de los sectores progresistas que nos deben dejar como lección, uno, que la unidad de las fuerzas políticas progresistas es condición necesaria para poder seguir avanzando».
La tensión generada tras la primaria, también podría poner en riesgo los acuerdos que necesita el gobierno para sacar adelante la agenda legislativa, especialmente la reforma de pensiones.
Por eso desde el Ejecutivo buscan apurar la votación para evitar que ese debate se vea cruzado con la elección municipal. (El Líbero)